-Capitulo 5-

573 77 11
                                    

Sakura estaba haciendo el desayuno, claro si es que se puede desayunar a las 2 de la tarde.

Después de casi un mes de trabajar sin parar, tuvo un descanso casi obligado de parte del mismísimo hokage.

-sakura, le estas quitando el trabajo a los demás médicos- le reprochó cansado de tener que regañar a su alumna incluso siendo hokage- haz tomado turnos dobles todos los días Sakura, no puedes seguir trabajando si tu salud esta comprometida. Así que sal de aquí y descansa, es una orden-.

Bla Bla Bla, sexto hokage pervertido pensó la kunoichi metiendo su sopa instantánea al microondas, como se atrevía a tratarla como niña después de tantos años.
Aunque se sentía bien al fin tener 3 comidas al día que no fueran las comidas de la caja expendedora. Tampoco es que tuviera muchas ganas de comer, solo lo hacía porque se lo había prometido a Kakashi y a sus padres.

A veces lo olvidaba, pero aún dolía mucho.

Claro podía permitirse llorar tanto como quisiera, aunque la última vez que lloro hasta el amanecer causó una horrible migraña, lo más difícil de pasar eran las noches, cuando la cabeza dibagaba, solo podía pensar en el, en todo el, su cabello, su quijada tan varonil, su cuerpo, sus labios, sus ojos tan oscuros...

Sonó el pitido de él microondas sacándola de sus pensamientos.
Incluso la pequeña sopa miso le recordaba a él, sacó la sopa, pico verduras y, cuando estaba finalmente preparada para desayunar paro en seco escuchando unos toques a su ventana.

Cansada, se paro para abrir la ventana y regañar al niño insistente.

-Konohamaru, ya te dije que Naruto no está aquí, esta ocupándose de los preparativos de su bod...-
Al abrir la cortina se encontró con unos inmensos ojos negros asustandola al instante, era Lee colgándose de una de las plantas de la vecina de Sakura, giro y la saludo con alegría.

-BUENAS TARDES SAKURA-CHAN- grito el chico de cabello de tazón con muchas hojas en el cabello y una viva sonrisa en su rostro- ¡te vez radiante como siempre! te quería invitar a...-

Estaba concentrado en su equilibrio, pero apenas sakura abrió la cortina se concentró en ella, tardó unos segundos en darse cuenta de que ella estaba en completo silencio con su rostro hecho un tomate cubriéndo su cuerpo con su reconocida bata.

Ambos se miraron por unos segundos que parecían eternos.

-AHH, TE INTERRUMPÍ EN ALGO? KAMI-SAMA PERDONAME, NO FUE MI INTENCIÓN SAKURA-CHAAAAA...

En medio de su disculpa Lee callo desde el tercer piso donde vivía Sakura, la médica salió de su vergüenza inicial a un espanto total.

-¡Lee!- grito esperando que haya caído intacto, sin suerte, ya que se veía su cuerpo estampado contra el suelo.

Sakura salió de su departamento rápidamente, preocupada por la integridad de su amigo, apenas llegó le hizo un rápido chequeo mientras el seguía perdidamente sonrojado.

-Lee un día de estos tus acrobacias te van a matar- dijo la pelirroja reprochandolo, no le gustaba tratarlo así, pero la mantenía en constante preocupación.

Mientras extendía la palma sanadora en los rasguños de la mano de Lee, Sakura se percató de que eran numerosas las cicatrices en su mano , acariciando su piel se dio cuenta de que, era en realidad muy dura, pero, a la vez suave, tomándola, se dio cuenta de lo mucho que había crecido su mano, la suya era pequeña en comparación, lentamente junto las palmas, comparándolas o eso planeaba hacer cuando.

-S-Sakura-chan- el rostro del chico de corte de tazón se enrojecio con intensidad, así como el de la oji verde.

Por un momento de lucidez, no pensó realmente que estaba haciendo, pero tan pronto Lee habló pudo ver la situación tan vergonzosa en la que se había metido.
Se levantó tan rápida como si de minato se tratara y le preguntó.

-b-bueno Lee, ¿qué haces aquí?- preguntó la chica ofreciéndole la mano, el sonriente aceptó.

-Bueno, me enteré que en el Este de la villa se inaugurará un nuevo mercado, habra muchas cosas plantas, animales, incluso podríamos inscribirnos a una carrera juntos-relato el oji negro con profunda felicidad, como si de un niño se tratara, contando con los dedos las actividades que podrían hacer juntos.
Sakura no pudo evitar sonreír ante la ternura de él chico.

-Lee, me encantaría pero... - era un lindo plan, y de hecho, no tenía otro plan en su día, todos sus amigos estaban ocupados, Naruto estaba planificando su boda junto con Hinata, Ino regresaría hasta quien sabe cuando, Tenten y Neji estaban en una cita que ellos no consideraban una, sus demás amigas en sus trabajos, quien diría que la vida adulta sería tan exigente de tiempo.

Solo tenía una razón para no ir, la razón por la que había rechazado muchas invitaciones anteriores.

-aún... No puedo- respondió melancólica.
Miró al piso ocultando sus brazos con culpa, por alguna razón, no se sentía indiferente al rechazarlo, se sentía, triste.
Probablemente en su interior esperaba ir, después de todo, al acabar la guerra ella y Lee eran más cercanos.

A veces salían a algún parque a hacer ejercicio juntos, aunque ella se iba a mitad del entrenamiento totalmente molida y el la seguía hasta ir por un helado, otras veces tenían misiones juntos,  misiones muy importantes en las que eran requeridos por sus capacidades, otras veces el le llevaba algo de comer al hospital.
Sin duda Lee era un querido amigo para ella, tal vez era por eso que se sentía tan mal rechazandolo, sólo tal vez...

-oh... - bajo los brazos anteriormente levantados de la emoción-entiendo... -
Trato de ocultar su tristeza, pero su rostro era sincero como siempre,pareciera un perrito a punto de llorar, ella se conmovió de que, por lo menos alguien la tomará en sus planes.

-b-bueno, sakura-chan, será para la próxima- Lee trato de reponerse, no quería que sakura lo viera triste, aunque de verdad lo ilusionada la idea de ir juntos a algún lado.

La oji verde vio como el adicto al ejercicio se alejaba cabiza baja, no pudo evitar sentirse peor.
Si lo pensaba bien tenía la opción de volver a su casa a seguir auto compadeciendose, o podía pasar un buen día con un amigo.

Después de unos segundos de deliberación corrió a empujarlo.

-¡w-wuo!- lee casi se caía, giro y observó a sakura sonriendole como no hacía hace mucho.

-bueno, hay que ir antes de que cambie de opinión, esperame aquí, iré a cambiarme-corrió hacia las escaleras de su departamento perdiéndose de la vista de Lee

Cuando Lee ya no la pudo divisar, aseguró el perímetro, serciorandose de que ella no lo viera, cuando confirmó que estaba solo, salto hacia el cielo lo más alto que pudo , grito moderadamente para no llamar su atención, pero para Lee ser discreto era como caminar para un Pez, tenía tanta energía en el corazón que podría correr un maratón completo de toda la aldea sin sudar.

Después de todo, extrañaba pasar tiempo con la peli rosa y hoy era el día en el que podía sacarla de su casa por lo menos unas horas, y tal vez, ver la sonrisa que tanto extrañaba.

-×-

...
Hola!
Sigo viva jaja, por poco
Con la pandemia he tenido problemas de sobra, aunque no creo que eso sea excusa para dejar algo sin acabar, así que espero publicar por lo menos una vez a la semana, si no, probablemente capítulo doble <3
Espero mantener mi promesa, muchísimas gracias por mantener este fanfic vivo con sus comentarios, me motiva muchísimo
Los quiero mucho, muchas gracias por leer ❤️

&quot;Tal vez...Solo tal vez te quiera&quot;Where stories live. Discover now