Te Juro (meliodas y tú)

Cat

'Narra ________'

-¿ha pasado algo entre ustedes dos?-preguntó una voz a mis espaldas, haciéndome salir de mis pensamientos.

-ah, no fue nada. Charlas de chicas...-él sonrió coqueto.-no te ilusiones, no hablaba de ti enano.-

-lo sé, tus opiniones sobre mi prefieres decirlas cuando estemos a solas.-movió las cejas de arriba a abajo.

-¡n-no, Meliodas ya deja de jugar!-me sonroje.

-ya, ya, tranquila... ya sé lo que piensas de mi.-alce una ceja con diversión y él se sentó a mi lado.

-¿ah, si? ¿y qué es lo que pienso?-pregunté en tono de burla.

-que soy sexy, irresistible, perfecto, tu hombre ideal.... ¿ya dije sexy?-me reí a carcajadas.

-¡si, claro! Ya quisieras.-me limpié una lagrima por la risa.

-lo dirás en voz alta en nuestra luna de miel, ya verás.-tomó un sorbo de su cerveza.

-tu perversión no tiene límites. Ojalá nuestros hijos no sean así...-al darme cuenta de lo que dije me tape la boca con ambas manos mientras él me veía sonrojado y sorprendido.

-¿tú quieres tener hijos... conmigo?-sonrió.

-n-no, ¡digo, si! Bueno... no sé, lo dije sin pensar.-dije rápidamente. De pronto tomó mi cara en sus manos y me besó apasionadamente.

-yo también quiero tener hijos contigo, que no te dé avergüenza, después de todo, cumpliré todos tus deseos sin rechistar... ¿como los llamaremos?-preguntó como si nada, a la vez que me abrazaba por la cintura reposando su mejilla contra mi hombro de forma cariñosa.

-haces que te ame más.. pero... no lo sé, nunca me había puesto a pensar en formar una familia hasta ahora. De todos modos, antes de tener hijos tenemos mucho que hacer...-su rostro mostró curiosidad.

-si que te apresuras, pero si quieres empezaremos ésta noche.-apoyó su mentón en mi hombro.

-¡no hablaba de "eso"!-

-no evitarás ese tema por siempre.-susurró en mi oído de forma sensual, haciendo que me averguencé más...

-ya enserio, siento que necesitas tratamiento para calmar esas hormonas.-puse un dedo en su nariz.

-no es eso, es que es divertido molestarte.-lo miré mal.-y sobre todo, me gusta verte sonrojada, y más por el hecho de que yo te provoco eso.-puse los ojos en blanco, para después sonreir inconscientemente y después fruncir el seño.

-¿me estás manipulando con alagos?-me acerqué a su cara hasta rozar nuestras narices, poniéndolo nervioso.

-um... no...-me acerqué mucho más hasta estar a milímetros de sus labios.

-¿estás seguro?-pregunté con ironía.

-yo...-fue entonces que no pude resistir más y lo besé cerrando mis ojos. Al separarnos sonreí con aprobación.

-te lo dejaré pasar esta vez.-él asintió rápidamente.

-¡aguarda un momento, acabas de manipularme también, eso no es justo!-se cruzó de brazos haciendo un puchero.

-si, pero yo lo hice mejor.-

-eso es por que no usé mi truco secreto...-susurró para si mismo.

Si, si, no creas que yo soy completamente inocente.

-hmp...-

-de todas formas, ¿qué se supone que haremos ahora?-

-pues, tengo que ver a las Elementales... ahora que todo volvió a la normalidad tengo que... recibir sus poderes para volverme la Reina del Caos. Y revivir a alguien...-me observó fijamente.