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O-Ophelia, has estado en mi mente
durante muchísimo tiempo
O-Ophelia, que el cielo ayude
al tonto que se enamora

Alyssa posó su cabeza sobre la fría almohada, repasando en su mente cada detalle que había vivido hacia tan solo unos minutos.

Un cosquilleo en el estómago la invadió de inmediato, recordar la mano de Draco alrededor de la suya hizo que sus mejillas se pusieran coloradas y calientes.

Eran cerca de las dos de la mañana cuando por fin pudo conciliar el sueño.

Domingo por la mañana, tenía tantos deberes que hacer para entregar al próximo día. Apenas se levantó fue directo a la biblioteca y pasó ahí gran parte de la mañana, el estómago le rugía pero no le quedaba mucho tiempo para terminar sus informes. Luego de la hora de almuerzo, aún con el estómago doliéndole se quedó dormida entre los libros.

- ¡Carson! - la despertó un fuerte golpe dirigido a la mesa, lo que la hizo rebotar entre los libros.

- ¿Qué quieres, Malfoy? - era la primera vez que Draco le hablaba en público sin burlarse de ella.

- ¿La baba es parte del informe? - se burló Draco.

Crabbe y Goyle entraron por la puerta buscando a Malfoy, ambos le dirigieron miradas confundidas a su amigo ¿qué hacía con la sangre sucia?

- ¿Qué hora es? - preguntó Alyssa aún adormecida.

- Son las 8 - le dijo Draco levantándose del asiento y tomando un papel, el cual arrugó formando una bola y se la tiró a Alyssa en la cara para luego marcharse con sus amigos - ¡sangre sucia!

La bola rebotó en la frente de Alyssa e hizo que cerrara los ojos y se echara hacia atrás, era bastante pesada y le había dolido.

Antes de salir por el umbral, Draco se dió la vuelta y le guiñó el ojo.

Alyssa recogió la bola de papel del suelo y la desenvolvió, dentro encontró un bombón de chocolate y una nota.

"Torre del reloj. 9 en punto".

Alyssa tomó todas sus pertenencias rápidamente y salió echa un petardo por el pasillo, pasando a través de Crabbe y Goyle, lo que hizo que tropezara unos pasos y luego volviera a retomar su rumbo hacia la habitación.

- ¡Lo siento! - gritó Alyssa.

Tenía tan solo una hora para ver a Draco en la torre del reloj, al llegar al salón común de Ravenclaw, lo encontró vacío y se extrañó ya que los alumnos solían jugar en esa hora.

Subió a su habitación y se cambió la ropa, el estómago le dolía pero no tenía tiempo de ir por comida, desenvolvió rápidamente el chocolate que le dio Draco hace unos instantes y se lo metió a la boca, casi sin masticar se lo tragó.

Cuando llegó a la Torre del reloj, Draco no estaba, miró hacia el frente, aún estaba claro el día, luego miró las agujas del reloj.

Eran apenas las cuatro de la tarde.

- Te mataré - susurró Alyssa riendo.

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La canción del inicio es Ophelia de The Lumineers
Muchas gracias por leer❤

La Ravenclaw que conquistó SlytherinWhere stories live. Discover now