¿No te pasó algo como que de pronto te vuelves un cantante famoso, ganas incontables premios, tienes muchos amigos y luego caes en lo más profundo de la soledad donde ya nadie te soporta y lo único que quieres es volver a tu pueblo con tus gallinas...
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—¡Dilo ya! —me gritó Chase, giré a verlo y lo callé con el dedo.
—¡Ornella! —dije. Y la muchacha, por primera vez, se quedó en silencio.
—¡Ganaste, Orne! —chilló Lara y la abrazó, entonces todo el grupo se hizo una bolita mientras se abrazaban todas. Ornella empezó a llorar cuando entendió bien lo que había sucedido.
—¡¡Me va a dar algo!! —Empezó a gritar.
—Bien, vamos a darle unos segundos a Ornella para que se calme, y hablaremos un momento con nuestra banda invitada.
Y así las participantes salieron del escenario, dejándonos solo con la banda. Los fans no dejaban de gritar por tenerlos frente a frente. Era una sensación increíble.
—Hola, chicos —saludé, ellos caminaron hacia adelante para acercarse al público.
—¡El único e inigualable Julien Garnier, señores! —señaló Logan con una amplia sonrisa antes de que chocáramos las palmas y compartiéramos un breve abrazo de camaradería.
Eric, Blake, James y Carter también se acercaron a chocar los puños para saludarme.
—Llegó el gran día, gente. Miren a todos estos hermosos humanos que nos acompañan esta noche... —Eric señaló hacia el público con la barbilla y llevó sus manos a la altura de sus sienes para simular una explosión en su cabeza—. Wow. Solo wow. ¡Esto es increíble!
—Increíble se queda corto, hermano —rio Blake y levantó la mano hacia el público—. ¡Buenas noches, Counterville!
Los espectadores gritaron con energía en respuesta.
—¡Hola a todos! Nos alegra ser parte de esta noche tan especial. —James hizo una pequeña reverencia al público mientras llevaba una mano a la altura de su corazón—. ¡Gracias por recibirnos con tanta calidez en su país y en este escenario!
El bullicio del público aumentó.
—No se podía esperar menos del Caos, ¿cierto? —Carter les guiñó un ojo y luego se volvió a mí—. Tienes excelentes fans por aquí, mi amigo.
—Y talentosas —añadió Logan—. Las voces que se presentaron esta noche... ¡Demonios! Todos teníamos la piel de gallina mientras las escuchábamos cantar.
—Fue una competencia reñida —asintió James.
—Reñida, sí —respondió Logan—. Pero había que elegir una ganadora y ustedes hicieron su trabajo, gente. Así que esta noche nosotros y... ¿Ou...della? —Me miró en busca de apoyo.
—Ornella —le corregí con diversión.
—Otella... —pronunció Logan con cara de confusión.
—Or...ne...lla... Ornella —pronunció por fin con algo de dificultad y el público celebró mientras los demás reían—. Lo lamento, soy terrible. Or-ne-lla, Ornella... —repitió con una sonrisa y el rostro algo enrojecido—. No volveré a olvidarlo, lo prometo —rio.
