—¡Maldición!— dijeron los dos al unísono, sus entrañas se removieron tras el subidón de adrenalina y miedo cambiando sus gestos de tranquilidad a uno de terror puro.

—Ten rápido, tápate tu nariz y boca, no aspires la niebla— Yoongi le tendió un pañuelo ya amarillento por el desgaste y lo colocó rápidamente contra su rostro.

Taehyung repentinamente agarró su mano jalándolo con fuerza para guiarlo entre las ramas y las hojas que crujían como si pisaran huesos bajo sus pies. Aquella blanca neblina se acercaba mientras una silueta se observaba al fondo, de gran altura, negra, intangible y siniestra que se acercaba a toda velocidad persiguiéndoles, corrieron con todas sus fuerzas por unos minutos.

Sus alientos fríos dolían al salir por sus gargantas y sus piernas ardían por el esfuerzo, poco a poco el cansancio fue presente en sus cuerpos, el aire comenzaba a faltar en sus pulmones y su rapidez se volvía lentitud.

Solo unos cuantos metros más y estarían seguros, debían aguantar solo unos instantes ya que a la lejanía en una llanura rodeada por bosque varias cabañas con luces naranjas se divisaban.

Una de las cabañas abrió rápidamente su puerta y un chico de cabello negro salió de ella —¡Rápido, corran!— gritó con desesperación mientras hacía señas para que entrarán.

La niebla les tocaba los talones y el desnivel del suelo no ayudaba mucho en huir, en un momento un estruendo se escuchó, era la farola que había resbalando de las manos de aquel chico extraño, quien rápidamente se regresó por ella acercándose a la oscuridad del bosque.

—¡Yoongi estúpido!— gritó Taehyung con desaliento mientras gruesas gotas brotaban de sus ojos —¡Eres un tonto!, ¿Qué le diré a Jimin? — sollozó alto mientras sus piernas seguían moviéndose.

Jungkook observó como aquel chico juntaba su farola abrazándola e intentando pararse con miedo y confusión, cerraba sus ojos con presión y buscaba con exasperación su pañuelo que había resbalado de sus manos instantes atrás.

Definitivamente sería atrapado, no había escapatoria, era su final, moriría. De repente sintió unos fríos dedos que lo sujetaban de su brazo mientras colocaban un pañuelo sobre su cara.

Jungkook llevó su antebrazo a su nariz y comenzó a correr arrastrando a aquel chico aturdido, no podía dejarlo solo con aquella criatura grotesca.

Taehyung corría guiándolos, llegando a la cabaña a salvo y volteado hacia atrás asustado al llegar solo, sin Yoongi y sin Jungkook, su vista se enfocó en la lejanía donde los chicos luchaban por escapar de la densa niebla.

Solo faltaban 5 metros, solo 5 benditos metros, su pecho no aguantaba más, Jungkook tuvo que calar aire por el evidente agotamiento respirando aquel humo blanquecino, cayendo abruptamente y junto a él Yoongi.

El castaño corrió hacia ellos tomándolos por el pliegue de su brazo con ayuda de Jin, arrastrándolos hasta su hogar donde cerraron la puerta fuertemente disipando la bruma del aire.

Aquella terrorífica sombra se alejó al perder su objetivo, adentrándose de nuevo hacia el bosque, pero no sin antes señalar hacia la cabaña y soltar unas palabras inexplicables, perdiéndose entre la obscuridad de la noche.

Sudados, cansados y horrorizados estaban aquellos 4 chicos dentro de la choza —¿Cómo se te ocurre hacer eso Taehyung?, ¿Estás loco o que?— regañaba el azabache con bastante molestia —¿Por qué no se lo comunicaste a Nam?... Y tú Yoongi ¿Cómo te convenció este cabeza dura de hacerlo?— sus rojas mejillas mostraban el tremendo enojo que hervía en su interior hasta que volteó a ver al joven que recobraba la consciencia lado de él, relajó su gesto y volteó a ver a los contrarios —Se han salvado pero no vuelvan a hacer esto en secreto.

Terminó de ponerse de pie agarrando su atolondrada cabeza —¿Cómo te llamas?— le preguntó al chico de cabello negro —Yo soy Jin— mostró una sonrisa gentil.

—¡Jungkook, se llama Jungkook!— dijo emocionado Taehyung.

—Shhh... A ti no te pregunté y aún obtendrás un castigo por ponerlos en ese peligro.

—Jungkook puedes acostarte ahí—señaló una pequeña cama de caoba desgastada con sábanas rotas pero tendida pulcramente.

—Lo dejaremos dormir— dijo firmemente mientras los contrarios tomaban asiento en los bancos alrededor, sus cuerpos estaban siendo iluminados por las luces amarillentas de las velas y calentados por el pequeño fuego de estas, mirando el lúgubre bosque por el cristal de la ventana, se habían salvado, pero no estaban seguros cuanto durarían sus esperanzas. 


Nueva historia...
Espero que la disfruten, me entretuve mucho escribiéndola, es una historia muy significativa para mi, y tocará temas delicados por lo que recomiendo discreción y respeto.

Los errores ortográficos serán corregidos cuando la historia pase a edición.

Los quiere Mayu.

Alone In The Woods  [KookV/ Yoonmin/ Namjin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora