🧁 2

2.4K 241 32
                                    

Reiji terminó de preparar el pastel, lo dejó sobre la mesa de la cocina y cortó dos porciones, una para su hermano menor y otra para la jovencita recién llegada; preparó té y sirvió dos tazas para ambos menores.

– Gracias, Reiji-san –sonrió.

– ...Claro.

El chico acomodó sus lentes mientras suspiraba y salió de la cocina. Ambos jóvenes comenzaron a comer.

– Es un buen pastel, ¿Verdad, Thiery?

– ¿Te gusta el pastel, Teddy?

Ambos se miraron, con cierto recelo.

– ...Tú eres Kanato y él Teddy, ¿Verdad?

– Sí...Tú eres Tn y él Thiery, ¿No?

– Sí...Me gusta tu cabello.

– Gracias –sonrió.– A mí también me gusta el tuyo. Y tu vestido, pareces una muñeca.

– Gracias –sonrió, con un pequeño sonrojo.– Me gustan los vestidos, y verme como muñeca.

– ¡¿Te gustan los vestidos?! ¡Yo hago vestidos! ¿Puedo hacerte uno?

– ¡¿De verdad haces vestidos?! ¡Me encantaría que me hagas uno! Seguro eres muy bueno.

– ¡Sí! Terminemos el pastel y te muestro mis muñecas.

– ¡Amo las muñecas! –rió.

Los pequeños terminaron sus porciones de pastel y la taza de té, para luego levantarse; la chica se sirvió otra porción y siguió al de ojos lila.

[Cuarto de muñecas]

Tn llevó una porción de pastel a su boca, mientras observaba las muñecas de "cera" vestidas de novia.

– Son muy hermosas... –lo miró.– ¿Tú hiciste los vestidos?

– Sí. Siempre hago los vestidos de las novias sacrificadas.

– Así que eran humanas...Genial –sonrió.

– ¿No temes?

– No soy humana, así que no tengo porqué.

– Cierto. Entonces, déjame tomar tus medidas, por favor.

– Sip.

La pelirrosa dejó su conejo de peluche y el plato con pastel sobre una mesa, para luego pararse a donde el contrario le indicó. Kanato tomó una cinta para medir y comenzó a tomar las medidas de la joven.

– Oh, eres muy delgada.

– Gracias –rió.

– Te haré un vestido color pastel.

– Me gusta –sonrió.

– Cuando termine tu vestido, tendremos una fiesta de té y lo usarás.

– Me encanta la idea. A Thiery y a mí nos encantan las fiestas de té.

– A Teddy y a mí también –la miró.– Listo, ya tengo tus medidas. Será un vestido hermoso.

– Seguro que sí –sonrió, tomó el plato de pastel y comió un poco.– ... ¿Quieres?

– ¡Sí!

El pelilila abrió la boca, para ser alimentado. La ojirosa se sonrojó, pero sonrió; tomó un poco de pastel y se lo dio en la boca al contrario.

– Eres muy lindo, Kanato-kun –sonrió.

– G-Gracias... –tartamudeó, sonrojado.

La puerta del salón se abrió de pronto, y unos pasos se oyeron acercarse a ambos.

Gluttony 🧁 Kanato Sakamaki 🐍🔞Where stories live. Discover now