PROTEGERTE || KARMA AKABANE X TÚ

CAPÍTULO 21

=POV _____=

Nuestro viaje a la isla del sur había dado a su fin.

Tras unas semanas más de descanso, ahora me encontraba sentada en mi sofá con Hoshiko en mi regazo.

— ¿Esto es en serio? ¡Ya me he visto todos los animes de Netflix! Y también diría los que no están... Tendré que investigar más a fondo las “páginas prohibidas” —murmuré con un dedo sosteniendo mi barbilla—. ¡No tengo nada que hacer! Moriré de aburrimiento, sola y virgen.

El sonido de mi teléfono interrumpió mi momento drama queen.

— Moshi moshi.

— Hasta que contestas...

— ¿Teñido?

— Ya estamos... En fín, no he llamado para eso.

— ...

— ...

— ¿Y bien? ¿No tenías algo que contarme?

— Se suponía que tenías que haber dicho, “¿entonces para qué me has llamado, Karmita-kun?” —dijo en un intento de imitar mi voz, lo que hizo que soltara una pequeña risita.

— Bien, bien. Entonces... ¿Para qué me has llamado, mi querido, amado y adorado Karmita-kun?

— ...sí que eres aguafiestas. —dijo molesto.

— ¿¡Y ahora qué hice!?

— Nurufufufu~ Si que os entreteneis hablando el uno con el otro. ¿Os gusta pasar tiempo juntos? —se ecuchó de fondo la voz de Koro-sensei.

— ¿Ese es el pulpo?

— ¿¡Ah!? Pero que falta de respeto. —dijo indignado.

— Bueno, esto se está alargando demasiado. —intervino Karma—. Koro-sensei nos ha invitado al festival de fin de año, ¿te apuntas?

— ¿Eh? ¿Y por qué no me lo ha preguntado él directamente?

— Karma-kun quería ver si-

— Ya que estábamos... Así se ahorraba un viaje para no tener que ver esas malas pintas que llevas todo el día. —dijo cambiando su tono, al típico burlón de siempre.

— Eso se ha quedado grabado en mi pobre y desolado corazón. —fingí dolor y tristeza.

— ¿Entonces vendrás?

— No.

Escuché unos murmullos y unos cuantos golpes en la otra línea.

— ¿Por qué no? —preguntó indiferente—. Te vendrá bien salir.

— Muchas gracias por la preocupación Karmamá, pero tengo una cita que espero con ansias.

— ¿Una cita? —murmuró—. ¿Y quién es más importante que...tus amigos y compañeros?

— No digo que lo sea... Pero en verdad me apetece mucho. —dije intentando aguantar la risa.

— Ya veo... —subió su tono de voz—. Entonces ten suerte, con él. —dijo remarcando la última palabra.

— Oye...

— Dime. —dijo molesto.

— No sabía que era posible ponerse celoso de un sofá y una televisión.

— ¿Qué...?

— Nurufufu~ Te ha pillado con las manos en la masa~

— ¿Entonces irás o no? —peguntó con la voz temblorosa.