Rise up || Mody: una mirada distinta a la historia.

🥀Capítulo nueve.🥀

"me voy a levantar
y  voy a hacerlo mil veces otra vez
y me voy a levantar
alto como las olas"

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Fue una mañana, donde Margot estaba sentada junto a sus hermanos. Ni siquiera sabía porqué, siempre evitaba coexistir tantos en una misma sala. Últimamente , sus hermanos estaban demasiados molestos con todo, y ya cansaban.

Cuando se dió cuenta, Betty estaba molesta y cansada, hablando con us hermanos. Esta levantó su vista sorprendida.

—¿Le pasó algo?—preguntó Sweet pea mirando a la rubia menor.

—Creo que es la  acumulación de sus comentarios—asintió Margot. Esta abrió su boca  mientras miraba a los hermanos, decidiendo si decirles o no lo que tenía  planeado—De hecho, cansan un poco, ¿lo sabían?. Están constantemente  atrás de nosotras solamente porque estamos con chicos, pero fuera de  eso, parece ser lo único que les preocupa de nosotras—esta se encogió de  hombros para subir a la habitación con Betty.

—Ya los puse en su lugar—aclaró la rubia, mirando a su hermana mientras entraba a la habitación.

—Me tienen cansada—aseguró Betty negando.

—Te entiendo—Margot tomó aire, sin embargo, sus hermanos entraron.

—Fuera—habló Betty.

—Solo nos venimos a disculpar por ser tan idiotas—aseguró Reggie levantando sus brazos.

—Les llevó años—habló Margot.

—Ya ya, no es necesario que exageren—aclaró Sweet pea.

El teléfono de Margot sonó y todos la miraron. Esta observó aquel número desconocido y tragó saliva para mirar a sus hermanos mientras voltaba su celular—Ustedes no deben cargosearnos—aseguró.

Aquellos mensajes eran crueles, bastantes crueles para ella. Les dolían y quería opacar su dolor. Lo mejor que se le ocurrió, fue ignorar lo que pasaba. Sin embargo, con el transcurso del tiempo, aquél dolor se acomulaba, como cualquier otro sentimiento.

Intentaba ocultarlo cuando hablaba con sus amigas o mismo cuando hablaba con Cody. Por alguna razón, no solía hablar con el chico en persona. De hecho, se ignoraban, pero cuando se hacía la noche, solían escribirse por horas.

Margot estaba con sus amigas en la casa de JB cuando le llega un mensaje, instantáneamente aquél dolor volvió a su pecho y se quebró, sin embargo, fue más rápida y se encerró en el baño, sin dar tiempo para que nadie preguntara.

Estaba dolida, todo le pesaba suficiente.

¿Por qué revivir todo eso?. ¿Por qué se lo hacían?. ¿Por qué a ella?

Siquiera quería hacer nada más, solo lloraba y dejaba salir aquello que la acumulaba. Su madre, su padre, sus hermanos, los mensajes, su vida desacomodada. Todo la lastimaba y no podía hacer nada al respecto, aunque deseaba cambiar todo.

—Mar—pidió Betty golpeando la puerta—Ábreme , por favor. Hablemos. Me tuvistes que haber llamado, hubiera venido rápidamente. Vamos, por favor—rogó angustiada.

La rubia negó, con lágrimas. Siquiera tenía la fuerza de contestarle o levantarse del piso. Su alma estaba tirada y le pesaba demasiado. Todo le pesaba demasiado. Ella ya no lo quería. No quería nada. Solo, necesitaba alejarse de aquel dolor y no sabía como. Quería huir de todo lo que la lastimaba.