|Capítulo II - ¡Jódete!|

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1988 – Actualidad

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1988 – Actualidad

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Después de haber acabado las clases, Prince se dirigía a su hogar, a pie cómo todas las tardes. Su gran sueño era comprarse una motocicleta color púrpura, y violarse a Michael, por supuesto.

Aunque tenía muy en cuenta que todo aquello sólo eran puras fantasías. En ocasiones se imaginaba en su motocicleta, conduciendo por un valle hermoso con Michael sentado detrás de él abrazándolo por la cintura mientras apoyaba su mentón en su hombro, acariciando sus mejillas.

Era algo empalagoso pensar en éso, pero si alguna vez se le diera la oportunidad de estar así con él no la desaprovecharía. Lo llevaría a su casa, hablarían un buen rato, y no sé, tal vez se atrevería a besarlo; sin embargo, bien conoce que éso nunca llegará a  pasar. Según él, Jackson ni sabe de su mera existencia. ¿A quién quiere engañar? Sólo es un incomprendido, un solitario incomprendido.

—¡Los tacones son para mujeres, maricón! Gritó burlonamente un muchacho al ver el andar de Prince hacia su hogar con esos zapatos de tacón algo altos.

Prince pensaba en ignorarlo y sólo pasarle de largo, pero no dejaría ésto así, tiene que defenderse. «¡Jódete! Le contestó Rogers de la misma manera mientras le levantaba el dedo del medio, un gran "signo" de odio hacia alguien» El chico sólo hizo un gesto de desagrado y se marchó.

Nada de ésto le afectaba al joven Prince. Ha recibido miles de insultos ¿Por qué éste en especial le afectaría? Sabe que nunca será aceptado por la sociedad, sin embargo, con que él se acepte a sí mismo es suficiente para sentirse bien, para subsistir.

Finalmente había llegado a su hogar, una casa de dos plantas de altura, era algo grande pero tiene el espacio suficiente para hacer sus actividades. Entró y dejó su mochila en el sofá, entre un movimiento de baile fue a la cocina para prepararse una pequeña merienda.

Mientras comía se preguntaba "¿Por qué está tan mal nuestro mundo ahora?". De seguro debe haber cientos de personas gays que sufren día a día. Ha leído en las noticias crímenes de odio contra los homosexuales, donde los matan tan sólo por el hecho de serlo, por ser gay.

Otros han decidido el suicidio cómo su mejor opción, ya que no pueden vivir con los insultos que cada día se les otorgan malamente, con las burlas, con las miradas prejuiciosas, esas miradas de desaprobación que los siguen hasta por fin acabar con su existencia.
...

Michael también había llegado a su casa después de haberle dado un rato de placer a Charlotte, no le gustaba pensar éso, le traía asco. Al entrar pidió al cielo que sus padres no estuvieran ahí, pero al parecer su plegaria no llegó. Sus padres se encontraban muy presentes allí, su madre, Katherine en la cocina, y su padre, Joseph sentado en el sillón.

Universidad Homofóbica I PrichaelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora