Atrapados En Dramas.

Capítulo 17: Virgen de los adolescentes protégenos.

POV Emiliy:

Tyler se levantó bruscamente del sofá largando maldiciones en voz baja. Fue directo a la puerta y cogió unas llaves del llavero que colgaba a un lado.

- ¡Oye! Espera, idiota. -Corro hacía el y lo tomo de un brazo-. ¿¡Qué crees qué haces!?

- Iré a buscar a Axel. Está ebrio y en problemas. - Espeta-.

- ¿En el bar de la esquina? - Asiente-.

- Iremos. - Sentencio-.

Su semblante frío cambia a uno más calmado y suelta un suspiro.

- No, chaparrita, ve la hora que es, es peligroso que salgamos a estas horas.

- ¿Acaso oiste que te pregunté? No dejaré que vayas sólo, los policías están en su descanso. -Presiono mi agarre en su brazo-.

- Ey, baja la presión de tu agarre, señorita violenta. - Lo suelto y se frota el brazo con una mueca de dolor-.

- No era para tanto, débil. - Me burlo-.

- Chaparrita, por favor, necesito que te quedes aquí. No quiero que nada malo te suceda, no me lo perdonaría y Franco tampoco. - Da media vuelta y sale por la puerta-.

- ¡Y una mierda, Tyler! - Espeto. Tomo las llaves de mi casa, le pongo seguro a la puerta y corro tras él-.

Cuando menos se lo espera estoy metida en el asiento del copiloto.

- ¡Maldición contigo Emiliy! Eres una terca.

- Ya vámonos, Tyler. - Me cruzo de brazos-.

Era conciente de que esto es sumamente peligroso dado a que, los policías que cuidan de Tyler estaban en su horario de descanso, porque él, esta noche permanecía en mi casa.

Esto puede terminar o muy mal o muy bien.

《Virgen de los adolescentes protegénos》

- ¿Quién te crees? ¿Toreto? Bájale a la velocidad. - Digo colocándome el centurión-.

- Quiero llegar lo más antes posible. Antes de que Axel me cuelgue se escuchó un fuerte golpe y una maldición de su parte. Temo a que esté en problemas, Emi. - No quita la mirada de la carretera pero en su voz se nota la preocupación-.

- Axel es el que menos se mete en problemas de nosotros.

- Hoy está ebrio. - Inquiere-.

- ¿Qué se le dió por ir sólo? Nunca sale sino es con uno de nosotros. - Cuestiono-.

- No me sorprendería si estuviera con Liam. Últimamente salen a embriagarse los dos. - Asegura-.

- A mi tampoco. Es como si quisieran olvidarse de todo en una noche...

- O en todas esas noches. - Termina-.

Llegamos en menos de 10 minutos al lugar. Bajamos ambos del auto. La fría frisa de un otoño apunto de llegar golpea mi cuerpo, produciéndome escalofríos. Tyler lo nota y me ofrece su chaqueta.
El fue más inteligente al pensar en traerla.

El lugar por fuera estaba lleno de adolescentes fumando y otros besuqueándose. En la parte izquierda de la puerta de entrada, visualizamos a Axel, estaba arrodillado vomitando, mientras, lo que deduzco que es un guardia lo sostenía de la cabeza.

- Al menos está vivo. - Comenta Tyler más tranquilo-.

- Gracias al cielo. -Le susurro-.

Nos acercamos más donde el guardia, quién nos observa de pies a cabeza.