Capítulo 1

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Somos una especie de gran manada.

Sí. Creo que esa es la mejor descripción que puedo dar de todos nosotros.

Desde que tengo uso de razón que estamos siempre juntos. Hacemos todo, absolutamente todo junto...

Si alguno de nosotros cumple años, todos le organizan la fiesta. Cuando alguno actuaba en la escuela, todos estaban ahí para alentar. Partidos de fútbol, patín artístico... Siempre la manada está ahí. Al punto, que muchas personas no sabían quiénes eran los padres de quién. Es más cuando éramos chiquitos no sabíamos si éramos hermanos, primos o que.

No me malentiendan, amo a mis padres y a mis tíos. No es que no me guste estar con ellos, bueno hay momentos que un poco me jode. Pero entiéndanme, cuando quieren pueden ser realmente es agotadores.

Creo que todo empeoro más aun cuando fuimos creciendo. Más o menos cuando empezamos a dejar de pasar por debajo de la mesa corriendo y ni hablemos de cuando las chicas comenzaron con los cambios corporales, ahí sí que todo se fue a la mierda.

Eso de estar constantemente fijándome a hacia donde miro, si me acerco más de lo permitido, si digo algo que se pueda mal interpretar... Uff, es absolutamente estresante.

También debo ser justo y reconocer que con ellos no nos aburrimos nunca. De cada uno de los encuentros que tenemos, queda alguna anécdota y créanme que son muchísimas.

Pero la realidad es que ya estoy grande y quiero hacer la mía. Emprender vuelo en solitario, o al menos, sin los adultos.

Este verano va a ser un tanto particular. Sé que mis viejos no van a querer y van a poner el grito en el cielo cuando les diga que estas son las últimas vacaciones que voy a pasar con toda la manada. Estoy totalmente convencido que van a hacer todo lo posible y lo imposible, para que siga yendo de vacaciones con todos ellos. Son de la idea de que estaría "super" que el día de mañana nos acoplemos con nuestras parejas e hijos. Una absoluta locura.

Como también sé que mi tío se va a alegrar y no va a hacer el más mínimo esfuerzo por disimularlo; ya me lo puedo imaginar abriendo una botella de champaña para brindar y fumándose un habano. Al menos va a estar así por un rato, después la cosa va a cambiar y sé que se va a poner muy, muy fea...

Me recuesto en la reposera junto a la pileta del hotel, este año toco montañas y río.

Como todos los años se dejó al azar. Literalmente, tiran una moneda y que sea lo que el destino quiera.

Es un día sumamente soleado. El cielo esta de un celeste absoluto. Si bien es relativamente temprano, la temperatura ya está empezando a cocinarnos a fuego lento, hoy va a hacer un calor de locos. Solo se escucha el sonido de los pájaros cantando y las risas de mis viejos y los tíos que están en un extremo de la pileta, vaya a saber Dios riendo de que... Hay cosas que es mejor no saber; uno se puede llevar una imagen mental sumamente desagradable, que queda grabada de por vida y que ni el mejor psicólogo, se la puede sacar.

Cierro los ojos y disfruto del sol.

Toda esa armonía dura hasta que aparece el resto de la generación 2.0, es así como nuestros padres nos llaman ellos. Aparte del apodo que tenemos de nacimiento y que prefiero no reproducir.

—Pero... ¡¿Qué carajos te pusiste?! —escucho la voz del tío Jony que grita, haciéndome sobresaltar. Cuando abro los ojos para ver qué es lo que pasa, las veo... Luz y Pia están las dos con una biquini sumamente chiquita y cuando digo chiquita, es muy chiquita. Para colmo colaless... Por el amor a todos los dioses. Mi hermana esta con una biquini, pero con algo más de tela, no mucho más, pero...

Tal para cual... Generación 2.0Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin