Obligada a casarme con un monstruo.

Cap 3: secuestrada.

(Voltarrea- Italia).

Pov. Alexandra.

El capitán llamo mi atención por el micrófono, diciendo que me abrochara el cinturón de seguridad, porque ya íbamos a aterrizar, yo le hice caso, me abroche el cinturón, y espere.

El jeep aterrizo, baje de él, mire para todos lados, un chofer me llamo la atención, así que me acerque a él, lo salude cordialmente, él se presentó, dijo que se llamaba Fabius Morel, me ayudo con mis maletas, me abrió la puerta del auto, subí, y el comenzó a conducir hacia la casa de mis padres, yo nunca conocí la casa, llegamos a la casa, mejor dicho mansión, Fabius entro al garaje, estaciono el auto, me abrió la puerta, pasamos a la casa, allí nos esperaban tres empleadas, la más antigua se acercó y se presentó, se llamaba Matilde Jones, presento a su demás compañeras, yo subí a lo que sería mi habitación, mi cuarto era grande, de colores negro, rojo y blanco, me bañe y llame a mi madre, diciéndole que llegué muy bien, después dormí un poco, me desperté eran las 4 pm. Me bañe, me puse un lindo vestido color azul, unos tacones de terciopelo color negro, mi cabello lo deje suelto, no me maquillo, salí, fui a la cocina, le dije a Matilde que iba a salir, ella me dijo que iba a llamar a Fabius, yo le dije que no era necesario, salí afuera de la casa comencé a caminar, veía todos los lados, Voltarrea era hermoso, ví un restauran, entre tenía hambre, una chica vino a atenderme, cene tranquilamente, ví la hora, en el reloj del restauran eran las 7 pm, pedí la cuenta pague, me levante y salí afuera, el cielo ya no era el mismo hace unas horas atrás, ahora estába todo oscuro, se aproximaba una tormenta, no tuve miedo, corrí hacia mi casa, pero me perdí, anduve por todos los lados, maldita sea porque no le hice caso a Matilde, busque mi iphone en mi bolso, y no lo encontré, diablos lo deje sobre la mesita, sentí como me seguían, mire para todos los lados, y no había nada ni nadie, seguí caminando, (pero esa sensación de que me seguían, me seguía molestando), hasta que sentí una mano en mi boca, comencé a patalear, no se como pero me zafe de él, comencé a correr lo más rápido que pude, pero no se como lo hizo pero alguien salió enfrente de mi, me atrapo, el hombre era gigante, forñido, alto, pero hubo una cosa que tenía mi atención total, sus ojos era rojos, me arrapo y comenzo a hablar:

.....: No hagas esto difícil preciosa, si quieres vivir, vendrás conmigo- la voz del chico era sedosa y fría, como una serpiente que te atrae para matarte de un mordisco.

Yo: ¿Que? No!- iba a comenzar a gritar pero sus fuertes brazos me tomaron por la cintura y me levanto del suelo, poniendo una de sus manos en mi boca, me retorcí y trate de zafarme, pero apenas tome aire para poder seguir luchando, sentí un olor dulzón.

-Shhh, No dolerá Preciosa- seguí pateando y moviéndome hasta que el olor del pañuelo me comenzó a inundar por completo y la cabeza me dio vueltas, y quedé inconsciente.

Desperté en un cuarto antiguo, Diablos ahora estába secuestrada.