No hay tiempo II: Esperaré... Hasta que me perdones

Feliz cumpleaños Violeta

Evan por su parte se calló sentado en la cama de Violeta y Jenna y Criss fueron a preparar la cena, Klaus y Evan se quedaron en la habitación, cada uno sin decir palabra alguno, no se podría distinguir cuál de los dos estaba más sorprendido, pero Evan a parte estaba un tanto feliz del pequeño error de Violeta.

-Ama, hoy en la noche su vista comenzará a mejorar, entonces supongo que por todo lo que le está pasando su cumpleaños debe estar cerca

-Vaya sirviente más malo, ni siquiera sabes cuando es el cumpleaños de tu ama –Dijo Evan un poco celoso-.

-Está bien Klaus no te preocupes, no tenías como saberlo, y sí, falta poco para mi cumpleaños, es mañana

-Perfecto, entonces mi deber es hacer algo especial por usted

-Creo que debemos salir y dejar a Violeta descansar no crees cazadorsucho de cuarta –Interrumpió Evan para que él no arruinara la sorpresa que venían preparando él Jenna y Criss para el cumpleaños de Violeta.

-Si, creo que me haría bastante bien descansar, pueden retirarse si quieren, no se preocupen por mí, estaré bien sola

-Vamos –Dijo Eva y agarró por el brazo bien apretado a Klaus y lo arrastró fuera de la habitación

-Pero que te pasa –Le dijo Klaus un poco molesto-.

-No seas idiota, no crees que si sabíamos sobre su cumpleaños haríamos algo por ella

-Pero es mi deber

-Mira maldito cazador, te diré solo dos cosas, una: no te mato aquí mismo porque está violeta, pero como le vuelvas a tocar un solo pelo no me tomaré tiempo alguno para deshollejarte vivo y beberme t sangre gota a gota, y dos, Jenna se ha esmerado mucho en hacer algo lindo para Violeta, así que o te unes a la sorpresa o te largas, y mira que a mí por lo menos, no se me hace ningún ánimo el que te quedes.

-Está bien chupasangre melodramático, supongo que saldré a comprarle algún regalo a Violeta

-Y aprovecha de comprarte algún traje, te hará falta –Le completó Evan- Ha y s quieres no regreses, no hace falta

-Dejándote solo con mi ama, ni loco, tengo que protegerla de alimañas como tu

Acto seguido Klaus fue a su nueva habitación y se puso una camisa, después, tomó algo de dinero y salió en búsqueda de algún regalo para su Ama, no sabía muy bien porqué pero quería hacer algo especial por ella,

-Bueno supongo que esto es lo que significa ser un sirviente, querer por sobre todo ver feliz y bien a la Ama –Se dijo a sí mismo y se dirigió al centro comercial.

Pasó por muchas tiendas y la verdad es que no tenía idea alguna que comprar, hasta que recordó el collar de los cazadores y se dirigió a una joyería, ya tenía el regalo perfecto para ella, para completar su conjunto y que o se sintiera como una carga.

Ya se estaba haciendo tarde, y el cazador decidió ir de vuelta al departamento para poder estar en el momento en que Violeta comenzara a ver nuevamente, estaba un poco ansioso, era prácticamente un honor vivir todo ese proceso en conjunto con la Ama, y a pesar de haberlo vivido hace unos 5 años atrás, y su hermana pequeña hace dos, de todas formas se sentía entusiasmado ante la idea, entonces caminó rápidamente de vuelta a casa con el regalo de Violeta en uno de sus bolsillos y con su traje colgando desde el hombro por la espalda, había tenido que esperar varias horas, pero todo merecía la pena y aun más si era por ella.

Tocó la puerta y escuchó como alguien corría a abrirle, eran unos pasos ligeros así que lo más probable es que fuera Jenna quien le iba a abrir, de todos los vampiros ella era la que le caía mejor, pues era como una hermana por lo que se notaba para su ama y la cuidaba bastante, y efectivamente, al abrir la puerta era llena que lo jaló hacia dentro diciéndole que Violeta ya comenzaba a distinguir sombras.