that something | clifford

xxix

Mercy nunca leía a menos que se tratase de algo de la escuela. En cambio, disfrutaba mucho más las películas y pasar tiempo con sus amigos, con todos ellos. Mercy nunca pensó que llamaría "amiga" a una chica luego de haber cortado relaciones con su familia, pero, de alguna manera, "sus amigos" era ahora un grupo al que Frences pertenecía. Por supuesto, que no esperase ella que Mercy lo admitiera pronto.

Hoy les había llegado la noticia. Estaban todos juntos —hasta Ashton, quien había sido traído con mucho cuidado por Frences y cargado por Luke y Michael para subir las escaleras— en la sala, cuando Joy llamó a Ashton.

Cuando Mercy era muy pequeña, creía que Dara no era su hermana, sino su mejor amiga. Como todo niño pequeño que probablemente creía vivir en el espacio, Mercy estaba feliz con ello. Un día, Dara fue a pasar un fin de semana en casa de algún familiar que justo ahora no valía la pena recordar. Mercy lloró todos los días en que no pudo ver a su mejor amiga, y ahí se dio cuenta de que era su hermana.

No había sucedido lo mismo con Calum, pues Mercy había sabido entender el papel en su vida antes de que se fuera. Había sabido valorarlo, ella sabía cómo valorar a las personas mientras estaban con ella, y era una cualidad que no sabía que poseía.

Y era bueno, porque Calum estaba estable y recuperándose luego de dos días y medio de su accidente. Había salido de cuidados intensivos y se encontraba siendo transferido a la unidad de observación. Bastaría una semana para que pudiera volver a casa, aunque mucho más antes de que pudiera vivir normalmente.

El accidente le había roto una de sus costillas y había múltiples fisuras en brazo y pierna derechos. La costilla perforó uno de sus pulmones, y el golpe lo dejó inconsciente instantáneamente, provocando contusiones. Su nariz estaba rota también, vale decir, pero no era tan malo como sonaba.

Nada de infartos o paros respiratorios. Ninguna lesión cerebral o daño permanente. El doctor lo calificó como un milagro.

Michael tuvo razón al final. Iban a estar bien.

A penas recibieron la llamada, comenzaron el proceso de bajar a Ashton y movilizarse hacia el hospital de nuevo. A observación podía entrar todo el que el paciente quisiera, no uno por uno o en parejas, como en la unidad de cuidados intensivos.

Cuando consiguieron la habitación, entraron. Calum estaba despierto, ablando con su hermana mayor. Sus padres no estaban ahí.

Lo primero que hizo Calum fue ver el cuello de  Frences y alzar los antebrazos lo más que pudo, con una sonrisa. Malí se excusó para darles más privacidad.

—¡El collar sobrevivió, amigo! —exclamó. Frences sonrió con vergüenza y se escondió detrás del hombro de Mercy, quien por fin pudo volver a respirar con normalidad.

—¡Demonios que sí, Cal! —respondió Ashton, tomando su mano y saludándolo con cuidado.

—¡Lucas! —dijo Calum, viendo al rubio al lado de Michael que se cohibía de verlo inclusive mientras estaba inconsciente— Ya estoy despierto, hombre, no moriré.

Luke asintió con los labios apretados. Calum tenía un parche en su nariz que le había hablar raro, pero tenía el mismo humor que siempre.

—No me hables, perra —se apresuró Michael—. Casi me matas del susto.

Calum se encogió de hombros ligeramente y se volvió hacia Mercy, quien notó por su expresión preocupada, que había vuelto a llorar.

—Hey, Mer, mírame, ¿vale? —Mercy asintió, secando las lágrimas de sus mejillas— Estoy bien. O algo así. No te vas a deshacer de mí así de fácil, DeGraw.