Capítulo 14

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Son las manos de Louis las que llevan a Harry a tierra firme. Sus caricias, su toque demasiado cautivador y los jadeos que deja salir cuando se mueve es algo que tiene a Harry suspirando debajo del cuerpo del alfa, quien no pierde de vista ni un segundo la piel del muchacho que gime como si la vida se le fuera a ir en ello.

—Estás tan mojado, ¿cómo es posible? —pregunta con un murmullo en el oído del omega. Su piel se eriza y los dedos del hombre siguen tocando su entrada resbaladiza, tentando a todo aquello que está por descubrir—. Te hice una pregunta, Harry.

Y su voz es tan caliente que Harry vuelca los ojos cuando sus propios dedos pellizcan con más fuerza sus pezones rosados. Resulta delicioso el mero estímulo por la voz del hombre que no tiene ni mínima idea de lo que provocan sus palabras y ese sucio juego de sus labios.

—No lo, no lo sé, papi.

Ahí está ese tono dulce de su voz cuando deja salir las palabras que guarda con tanto recelo.

Louis jadea en su oreja y todo resulta ser demasiado para Harry, quien descubre que tiene un gusto particular por los gemidos del alfa y lo empapan de una manera que nunca antes había experimentado.

—¿No sabes qué te moja tanto, bonito? —cuestiona. Harry puede sentir como dos de los dedos del alfa se deslizan en su interior con tortuosa lentitud.

El omega se queja en su lugar llevando una de sus manos a la espalda descubierta de Louis, dejando allí sus uñas apenas enterradas en la piel que comienza a humedecerse por el calor que ambos comienzan a crear a su alrededor.

—No, papi. No tengo idea —dice con un suspiro atravesado.

Los dedos de Louis han entrado por completo y Harry solo puede morder su labio cuando suelta un chillido ligero por la necesidad de que el alfa comience a abusar de su entrada en todas las maneras posibles.

—Yo creo que todo esto es porque quieres tanto que llene tu agujero y te ensucie con mi corrida —Vuelve a murmurar. Sus dedos comienzan un vaivén lento en el interior del omega que provoca que sus labios se separen y un sonido sucio salga de allí—. Que lobito tan intranquilo.

Harry se desconoce. Louis llamándolo de esa manera solo provoca que su entrada se cierre en los dedos del mayor y que sus uñas se entierren más profundo en la piel bronceada del alfa.

Louis besa su cuello perlado y permite que su lengua beba del sudor ligero en la piel del omega. Harry jadea y mueve sus caderas para tener algo más, él realmente necesita más que los dedos intranquilos del alfa en su interior.

—Ya tómame, alfa.

La sonrisa en los labios del hombre solo enloquecen a Harry. Los dedos curiosos siguen marcando un ritmo en su interior y resulta más de lo que el omega puede soportar.

Se da cuenta de la reacción del hombre sobre los sonidos que escapan de sus labios con cada movimiento. Harry suspira cuando la presión en su vientre aumenta y la incongruencia se aloja en su lengua cuando pronuncia un centenar de palabras sin sentido justo antes de derramarse sobre su vientre, llegando a ensuciar su pecho con toda su corrida.

La satisfacción en la mirada del alfa no tarda en llegar. El hombre retira sus dedos curiosos del interior del muchacho y deja un golpe suave en la entrada de Harry que arrebata un gemido suave de sus labios color bermellón.

—Apenas empezamos, lobito.

Un azote demasiado suave llega al trasero de Harry que lo hace respingar por no esperarlo y jadea en el proceso. Louis no tarda en tomar su miembro en su mano dejando que Harry lo vea mover lentamente su palma de arriba a abajo mientras muerde sus labios mirando la entrada empapada del muchacho.

Amateur ꩜ abo! larryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora