Errónea venganza (Conor Maynard) *Detenida Indefinidamente*

Capítulo 8: "Una Sensación Extraña"

"Estas enamorada" Se había atrevido a decir la inocente chica que dormía a su lado. Esas palabras taladrában su cabeza por más de 3 horas, y cuando creyó que era suficiente para dejar de darle vueltas al asunto, salió de la habitación de su amiga y se encamino ha escaleras a bajo, pero justo en el primer escalón se encontrába Conor. El chico observába una foto de su ex y él en su celular, psandóle por desapercibída la presencia de Bella. Aunque cuando ésta logró enfocar bien su mirada sobre la imagen, una disgutánte volita en garganta aparecieron junto a sus ganas de llorar.

-No llores- se dijo mentalmente cuando, decidió a seguir bajando, para ir por un vaso de agua. La idea de que él siguiera enamorado de esa chica tonta, la matába por dentro y se arrepentía por haberlo besado. Ni siquiera quería pensar en la posibilidad que había de que él estuviera jugando con ella únicamente y en verdad no sintiera nada en el momento que la besába.

Cuando paso a un lado de él, atrajo toda su atención, bloqueando la pantalla de su celular y yendo tras ella. Talvez había dicho que quería llevar su plan a cabo, ya no le hayába sentido, estaba enganchado con ella y no podía negarlo. Por eso que cuando se vió ignorado por ella sintió algo de desesperación por atraer su atención, así que cuando ella le daba la espalda, la tomó por la cintura y la apego a él. Eso le había  tomado por sorpresa a Bella, pero no tanto como cuando sintió los labios de éste en su cuello, depositando besitos en lo largo de ese lugar. Deseaba tanto que siguiera , pero tenía que tomar la compostura, no iba a dejar que jugarán con ella. 

–¡Basta! –dijo sin fuerzas, pues cuando logró decir aquella palabra un suspiró rebelde había salido de su labios –. No lo vuelvas a hacer.

Se soltó de sus blancos brazos que la hacían sentir segura y se dió la vuelta para enfrentarlo de frente, no obstante, se arrepintió en un dos por tres. Sus ojos la hacían derretirse, y aún más cuando estában tan cerca. Tomando una postura severa de manera rápida y forzándoce así misma se matúbo de pie frente a él. 

La repentina seriedad que tenía plantada en la cara había logrado asustar a Conor.¿Por qué se comportába a... Entonces un foquito se prendió sobre su cabeza. Seguro lo había atrapádo viendo aquella foto en las escaleras. Aunque no estuvo seguro si su actitud era por celos o por arrepentimiento, y aunque deseo la primera opción, se decidió a preguntarle.

–¿Estas celosa o acaso... –no quería decirlo, le dolía el simple hecho de pensarlo– te has arrepentido?

Bella se llevo una gran sorpresa con la pregunta y se cuestiono en ese momento sobre que había que decirle; celosa, no había duda alguna de que lo estaba, pero arrepentida también. Se sintió atosigada por la pregunta y aú más por no saber la repuesta que le daría y en un intento de escapar de la situación se decidió a no mirarlo, y dejando el vaso en el trastero, dió un par de pasos hacia la salida, ignorandólo del todo. Hasta que Maynard la sostuvo por el brazo y dejándola estática la volvió a apegárla a él, pero esta vez se mirában los ojos; mas el contacto de sus miradas no duró más de 5 segundos, Bella había agachado sus cabeza en un intento casi fallido de sostener su compostura, pero Conor la hizo desistir cuando con sus dedos levanto su rostro para depués plantarle un apasionado beso. En ese preciso momento volvieron a aquella sensación placentera. Ambos se habían vuelto adictos a los labios del otro, y por más que quisieran negarlo, sus acciones delatában sus sentimientos. Tal vez no estában enamorados, como decía Anna, pero si sentían una fuerte atracción; que tarde o temprano se terminaría convirtiendo en amor.

– Sí, estoy muy celosa –declaró separándoce un poco–. Yo quiero que seas únicamente mío, y no quiero que sigas recordándola, quiero que dejes en el pasado todo lo relacionado con ella. Pero no puedo obligarte, menos si sigues enamorado de ella. Y es que tu me haces sentir una extraña pero hermosa sensación .

Conor encurbó sus labios en una dulce y tierna sonrisa. Amába el simple hecho de que lo admitiera, porque él también quería que ella fuera únicamente suya y de nadie más. De eso estaba más que seguro.

–¿Qué tipo de sensación? –preguntó enarcando una de sus cejas.

Bella lo miró unos segundos a los ojos y luego vió sus labios. ¿Qué era aquello? porque la hacia sentir tan bien, aunque su corazón golpeteaba fuertemente su pecho, como si quisiera salirse. En el estómago podía sentir algo que lo revolvía. 

–Es... una sensación extraña. Me hace querer estar contigo todo el tiempo, y cuando te acercas se acelera mi corazón –confesó.

Bella Hale era una persona directa, siempre demostrába lo que sentía y no se avergonzába, a menos que eso llegára afectar en su dignidad. En casos podía ser la peor enemiga, si la buscában por el lado malo; pero si del lado bueno se tratába, podía ser la amiga más fiel que podías tener. No era rencorosa, era de las personas que te escuchan y te aconsejan, y el valor que más resaltába en ella era la Justicia. Aunque tenía un lado débil, cuando una persona a la que apreciába con su vida la traiciona, la hacía decaer, aunque por su dignidad mantenía el rostro de "No paso nada, estoy bien y no me importa lo que me hayas hecho"  y te alejába lo más posible a ella. 

–Esa sensación se llama amor. ¿Jamás la habías sentido?– cuestionó Conor deseoso de probar nuevamente sus labios.

–Jamás – declaró antes de abalanzarse sobre sus labios.