¡No, no, esto no está pasando!

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Querid@s lector@s, quiero informarles que en este capítulo se va a hacer una descripción a fondo de la vida de los personajes, sus verdaderas intenciones, etc... Y desearles un buen año nuevo. También, aprovecho para agradecer la cantidad de personas que han leído esta historia. ¡Gracias! Ahora me callo, besos cezys.

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-¿Jenna?- me llamaba una voz femenina mientras viciaba al WoW (World of Warcraft)

-¿Qu.. Quién eres? ¿Y cómo entraste?- respondí, ofendida y con ganas de volver a la partida.

-¡Malnacida! Deja los juegos y préstame atención.- ya sabía de quien era esa voz rechinante. Mi madre, quien se debió haber fugado de Rehabilitación para venir a alcoholizarse y joder mi vida.

-¡A mí, me respetas!- respondí muteando el micrófono de los audífonos.

-¡Apróvechame ahora, que estoy sobria! ¡TE CONTARÉ SOBRE EL ESTÚPIDO DE TU PADRE!- gritaba mientras lloraba al compás de las voces chillonas de los niños rata en el juego.

-¿Qué tienes que contarme? ¡No hay nada que no sepa! Esta casa es mía, eso es todo lo que sé. Y no tienes nada que hacer aquí, mi padre me dejó esta casa cuando nos abandonó. Eso es lo que sé y lo que me interesa.- decía respondiendo a sus horribles alaridos.

-¡Tu padre me abandonó a mi y a tu hermana! A ti no porque siempre fuiste su favorita, pequeña ratita- Dios, siempre que me hablaba me llamaba así, pequeña ratita, lo odiaba -Tu padre te ama- prosiguió - Y te envía dinero todos los meses para tu colegiatura y lo suficiente para que te compres todo lo que quieras, incluyendo el dinero de la renta.- eso fue lo último, ya no quería ni verla. ¿Por qué me lo había ocultado todo este tiempo? ¿Por qué nunca me daba dinero a mí, para no tener que aguantar a mi jefe en Starbucks.

-¡A buenas horas lo dices, eh, Jessica!- odiaba que la llamaran por su nombre, en especial si era yo quien lo decía.

-Ahora, tu hermana y el amorsito de su novio terminaron, culpa mía, ligué con él. ¡Qué adorable fue! Y que débil-

-¡Buena Jessica, algo que puedes hacer!- la felicitaba con mucho ánimo porque en realidad odiaba a Mark, el novio (ahora ex-novio) de mi hermana.

-Ahora, dame el dinero para mis adicciones, y, me largaré.- así lo hice, le di unos 50 dólares y la saqué a rastras de la casa.

Cuando recién me recuperaba de la conmoción, de mi celular empezó a sonar la canción 5 Minutes Alone de Pantera y sabía que me estaban llamando. Contesté sin leer el número de la persona que llamaba.

American IdiotWhere stories live. Discover now