CAPÍTULO 32

25.4K 2.6K 1.4K
                                    

(Narra Jimin) 

Sentí una luz segadora tocar mi rostro, apreté mis ojitos deseando volver a dormir, me removi en mi lugar y sentí los fuertes brazos de mi amado Alfa posarse en mi pequeño vientre, aún sin ánimos de abrir mis ojitos, me di la media vuelta, quedando mi rostro en el pecho de mi novio. 

Me Acurruque más cerca de él, sentí como me apretujaba más hacía él, con delicadeza y ternura. 

Nos quedamos así un par de minutos, ya no pude conciliar el sueño, pero el aroma de mi Yoon me tenía tranquilo y relajado. 

Yoongi se empezó a despertar, yo me quede quieto, deseando poder dormir un poco más pero mi cuerpo no me dejaba. Sentí los labios de mi amado tocar mi rostro y labios, sonreí en medio del acto. 

- Buenos días mi pequeño Omega. 

- Buenos días mi gran Alfa. 

Reímos bajito y poco a poco fui abriendo mis ojos, viendo el rostro hermoso de mi Alfa. Le sonreí y el me dió un besito en la frente, amo que me de besitos así de tiernos. 

- ¿Cómo amaneciste cielo? - Me pregunto mi Yoon. 

- Muy bien amor y tú ¿Qué tal amaneciste? 

- Feliz de hacerlo siempre a tu lado. 

Ese tipo de palabras son las que más amo que salgan de los hermosos labios de mi amado Alfa. Ahora llevamos una marca que nos une en cuerpo y alma, nuestros lobos y corazones son uno sólo. La sensación de sentir lo mismo que mi amado es fascinante y me encanta sentirme así. 

- ¿Eres feliz mi amor? 

- Soy feliz siempre que estoy contigo Yoonnie

Los siguientes dos días la pareja de enamorados pasaron juntos cada minuto y cada segundo, se aislaron del mundo por un par de días. 

Se amaron de todas las maneras posibles, tanto con esos toques inocentes que aún no se perdían, con sus besos robados y apasionados, sonrisas cómplices y amarse apasionadamente por horas. 

La pareja tenía un amor puro y verdadero, que nadie jamás podría romper nunca. 

Yoongi estaba seguro que protegeria por el resto de su vida a su pequeña familia. No dejaría que jamás nadie los lastimara, así fuera lo último que hiciera. 

Jimin sabía que su Alfa los protegería, pero no le dejaría el cargo sólo a él, el Omega estaba dispuesto a ayudarle a su amado a que juntos logren salir adelante y sobre pasen todas las barreras que se interpongan en su caminó. 

Alfa y Omega estaban más que dispuestos a cuidar uno del otro y proteger con su vida a su pequeño ser de luz. 

Después de dos días encerrados la pareja, al fin salió de su pequeño nido de amor. Sonrientes y felices por estar enlazados. El Omega se sentía pleno al mostrar su reluciente marca, echa por el amor de su vida. 

Mientras el Alfa inflaba el pecho de orgullo, sintiéndose emocionado y digno de saber que el creó esa hermosa marca de amor en su pequeño Mochi. 

Juntos arreglaron la habitación, tomaron un baño en la tina relajante, sin morbo o segundas intenciones, sólo deseando tenerse cerca y pasar más momentos juntos. 

Salieron en medio de risas y chistes mal contados por parte de la pareja, se cambiaron y bajaron a la cocina. Tenían muchísima hambre, esos dos días apenas y habían comido algo, así que era de esperarse que el Omega tuviera mil antojos. 

- Yoon... Quiero helado de chocolate con mani y queso con jalea. 

- ¿Queso con jalea? 

- ¡Si Yoon! ¡Sabe delicioso! Deberías probarlo. 

EL HERMANO DE MI MEJOR AMIGO. ~Yoonmin~ (omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora