Nightmares

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Hope se hallaba sentada en el suelo con su espalda recargada en el tronco de su árbol favorito mientras Josie se encontraba sentada entre sus piernas envuelta entre sus brazos recargándose cómodamente contra su pecho.

El sentir de su calidez, su presencia y el firme latir de corazón que podía sentir y escuchar hacían a su lobo ronronear de felicidad. Le daba una calma tan profunda que no podía explicar y jamás quería dejar ir.

Con su mentón recargado en el hombro de la morocha tenía que luchar un poco por concentrarse en la tarea que está estaba haciendo. Su aroma le tentaba y sus cabellos rozando su mejilla le hacían cosquillas, las suficientes para pensar en hacer a un lado su cabellera dejando al descubierto su cuello pero sabía que si lo hacía perdería por completo su atención en lo que hacían y no debía hacerlo.

Era geometría y ella no era tan buena en ello pero quería ayudar, por fortuna Josie era más inteligente que ella pero aun así en ocasiones requería un poco de guía y ella quería ayudar. Quería ser lo suficientemente buena para su novia.

Su chaqueta cubría las piernas de Josie evitando que se distrajera y una pequeña mesa que construyó con ayuda de un vídeo en Youtube fungía como escritorio. Siempre intentaba cuidarle en todos los detalles posibles, era su manera de mostrarle cuánto le importaba y esperaba que ella lo sintiera.

La conversación con su tía volvió a su mente al notar como la brisa se enfriaba un poco más y el sol cambiaba de posición. Por un momento, se alegró de su temperatura anormal pero luego la tensión volvió a ella.

-Amore –. Susurro con suavidad.

-¿Si...? –. Respondió Josie distraídamente aunque enseguida dejo de poner atención a los números al sentir el tono dudoso en su novia.

La cobriza frunció su ceño en confusión y casi con temor susurró –Sobre hace un rato... ¿Crees que le gustó a Sadie?

-Si –. Soltó con simpleza intentando no tensarse o dejar que la molestia volviera ante el recuerdo.

Hope casi salto en su sitio y alejo su mentón del hombro de su novia para voltear a verla con preocupación –Oh, dios. Jo. Lo siento tanto. Yo no intentaba nada, te prometo que intentaré ya no...

-No. Hope –. Dijo Josie con firmeza girando un poco hacia encararla –Yo sé que tú casi no notas esas cosas. No notaste que me gustabas desde hace años así que soy consciente de tu falta de atención a eso –. Se rio por lo bajo mientras su novia soltaba un bufido y ponía los ojos en blanco pero luego asintió con un suspiro. La morocha le miro a los ojos y llevo su mano a su mejilla a la vez que le sonreía suavemente –No quiero que dejes de ser amable con los demás porque te preocupes de lo que puedo imaginar o ellos, para el caso. Eres demasiado hermosa como para que eso deje de pasar así que vamos a tener que hablar mucho y quizás alguna vez te grite por tu torpeza pero no haré que te vuelvas a cerrar al mundo y no dejaré que lo intentes.

Josie se acercó y depósito un dulce beso en sus labios que hizo que la cobriza se derritiera en su sitio mientras le aferraba con un poco más de fuerza.

La loba le miro a los ojos con seguridad y firmeza, sonriéndole dulcemente –Voy a poner más atención pero te doy mi palabra que sin importar lo que pase entre nosotras, jamás te engañaría.

Sus frentes se unieron y sus ojos se cerraron casi al unísono. Josie se movió en su sitio para acurrucarse más contra su novia que le acercó un poco más si es que era posible.

-Lo sé... –. Susurro la morocha –Y no porque crea que me perteneces o algo así, sino porque confío en ti y se quién eres.

Sus palabras provocaron que el ceño de la cobriza se frunciera profundamente mientras Josie se ocultaba en su cuello con una sonrisa.

Just a DreamWhere stories live. Discover now