Capítulo ♡ 35

590 49 4
                                    

❤🤍🖤

Serví un poco de té para ambos en la sala, esperaba que Yuta se calmara para hallar una solución. Me había comentado que comenzó a frecuentar ciertos lugares que lo llevaron a conocer personas que, en un principio, parecían querer apoyarlo al ver lo afligido que se encontraba, pero lo llevaron por un muy mal camino.

—Ya no puedo con todo esto, Youngsoo. No sé qué hacer, ni siquiera sé si puedo ir a casa.

—Yuta, tu familia te ama y de seguro que están preocupados por tí.

—Lo dudo mucho, incluso Jeno... Estoy seguro que me odia.

—Él no te odia —suspiré—, solo está algo celoso. No te preocupes por él ahora, tú eres el que está en problemas, así que preocúpate por tí primero.

Lo oí suspirar pesadamente, así que me acerqué lentamente a él y sobé su espalda mientras me sentaba a su lado.

—Youngsoo, de verdad no me siento bien. Siento que me volveré loco.

Soltó una carcajada irónica, como si estuviera exagerando, pero ambos sabíamos que hablaba muy enserio.

—Deberías intentar dormir un poco, te ves cansado —Sus ojeras se hacían notar y también había adelgazado bastante, cualquiera podría notarlo—. Puedes usar el sofá de la sala, ya mañana iremos arreglando las cosas.

Le sonreí y él asintió. Le entregué un par de mantas lo suficientemente gruesas para que no pasara frío, el clima otoñal no ayudaba demasiado.

Luego de asegurarme de su comodidad, por fin fui a darme una ducha rápida y entré en mi cama. El sueño no tardó nada en ganarle a mi conciencia y en poco tiempo me quedé dormida.

❤🤍🖤

Esperaba desayunar con Yuta, pero para mi sorpresa ya se había ido. Dejó las mantas perfectamente dobladas sobre el sofá y pude notar que no comió nada antes de irse.
Realmente ese chico me preocupaba.

—Me pregunto si habrá regresado a su casa. —comenté para mí misma.

Me cambié de ropa y salí para buscar a Jeno. Es su hermano y aunque no lo diga, debe de estar igual de preocupado que yo, o incluso más. Además, iba a poder averiguar si Yuta realmente había regresado a casa.

Me posicioné frente a la puerta de madera de mi vecino y toqué un par de veces.

Nada.

Mi paciencia no era mi fuerte en ese momento, así que tomé mi móvil y marqué el número de mi chico.

Diga.

—¡Jeno! —contesté rápidamente.

Ah, Soo ¿Qué sucede?

—¿Dónde estás? Yuta estuvo aquí.

Un silencio incómodo se coló en la llamada y lo oí suspirar.

¿Te hizo algo? Joder, siempre aparece cuando no estoy ahí.

No hizo nada malo, no pienses así de él —Me molestaba un poco que Jeno sea tan frío y duro con Yuta—. Es tu hermano.

Como sea... voy para allá.

No alcancé a agregar nada más, ya había cortado la llamada.

╰笑顔╮| •Lee Jeno•Where stories live. Discover now