Supercorp [Shots Traducidos]

If I Could Sink My Teeth In To You

Creado por Rara_Danvers [Más de 5.000 palabras]

Resumen; Lena es mordida por un vampiro alienígena y se convierte en vampiro. Kara es la única que puede mantenerla viva hasta que haya una cura.

Kara camina de un lado a otro fuera de la bahía médica del DEO masticando su pulgar. No se suponía que esto sucediera. No se suponía que esto sucediera. La misión había sido simple; capturar al alienígena con forma de murciélago que ha aterrorizado a National City durante la última semana y tráelo, con pocas o ninguna baja.

Habían tenido éxito en la primera parte, pero habían fallado miserablemente en la segunda. Ella había estado distraída. Había bajado la guardia. No sabían nada sobre este alienígena, además del hecho de que podía volar y era ligeramente humanoide. Desearía que hubieran sabido sobre el chillido sonoro. El chillido que había puesto a Kara de rodillas momentáneamente desviando su atención de la criatura y asegurándose de que su cabeza no explotara.

Alex había gruñido como respaldo en su receptor cuando ella también hizo una mueca por el gemido que llegó a sus oídos. Su ataque había sido coordinado, preciso y en movimiento cuando la criatura murciélago decidió derretir sus cerebros. Al ver una oportunidad, se abalanzó y agarró a una Lena desconsolada, sosteniéndola como rehén y hundiendo sus colmillos en su garganta.

Para entonces, el dolor había disminuido y Kara corrió hacia Lena, quitándole el ser. Pero el daño ya está hecho. Estaba sangrando y Kara le agradeció a Rao que la llamada había llegado justo a tiempo.

Lo que la lleva hasta aquí. De vuelta en el DEO, paseando fuera de la bahía médica. Oye que se abre la puerta y mira a Alex, que se quita los guantes azules con un suspiro. La boca de Kara se presiona en una delgada línea.

—¿Como está?

Alex pone sus manos en sus caderas, mirando hacia el piso, aparentemente tratando de encontrar la mejor manera de decir esto.

—¿Ella está bien? ¿Supongo? Sus signos vitales son buenos y, además de la herida por mordedura, no hay daños aparentes, pero no puedo imaginar que acabara de salir ilesa.

—¿Entonces está bien? —la voz de Kara es esperanzadora.

Alex se encoge de hombros.

—Como dije, es difícil de decir. Si está sucediendo algo no tenemos la tecnología para contarlo ni sabemos lo que debemos buscar. Lo mejor que podemos hacer es mantenerla aquí por unos días. Monitoree cualquier cambio en el comportamiento.

Kara mira el cuerpo inmóvil de Lena a través del cristal.

—Siento que esto es mi culpa —enfurruña, suspirando—. Le pedí que viniera para que pudiéramos clasificar al alienígena con la tecnología de Lex.

Alex pone una mano sobre su hombro.

—No sabías que esto iba a suceder, Kara —consuela—. Al menos ahora podemos descubrir qué es esa cosa. Si pasa algo, estaremos listos para ello —bosteza—. Voy a dormir un poco en el cuartel. No te tortures demasiado, ¿sí?

—Prometo que no lo haré —dice Kara, le echa una mirada más a Lena, mordiéndose el labio—. Aunque realmente espero que tengas razón.

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Todo se sentía caliente. Como si el magma fundido se derramara por todo su cuerpo. Sintió que tenía fiebre y escalofríos al mismo tiempo. Podía escuchar todo y nada a la vez. Podía verse a sí misma, ver los monitores a los que estaba conectada, ver su ritmo cardíaco lento a un ritmo lento. Sintió que no podía respirar. Ella necesitaba aire. Ella necesitaba-