Gifts of my crush ›› changlix

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Día de los enamorados, un día en el que las parejas pueden demostrar amor y aprecio hacia su compañero o compañera, día de las confesiones de algunos, y un día en el que el amor puede percibirse en el aire.

Felix no sabía si vomitar de ver tantas parejas tan melosas o evitar a toda costa entrar a las clases, bueno no era como si tuviera opción, así que lo mejor era evitar las arcadas y a las parejas, si eso estaba mucho mejor.

Caminaba por los pasillos, todos estaban tan emocionados, podía ver flores en la mayoría del lugar, los típicos chocolates, sus pies por fin lo habían dejado en su destino, su casillero, de inmediato lo abrió, todavía recordaba, antes le hubiera gustado encontrar una carta o por lo menos algo que indicara que tenía una clase de admirador secreto o un enamorado, pero nunca había nada, al igual que en ese momento.

De repente los gritos se hicieron presentes, Felix se exaltó al escucharlo, sabía de quien se trataba, era una de las chicas que se encargaba de hacer aquellos blogs sobre Seo Changbin, prestó más atención a sus palabras, se escuchaba muy alterada.

— ¡Emergencia, emergencia! ¡Seo Changbin trae un regalo!— Nayeon paso gritando por el pasillo mientras corría, todos los presentes se alteraron de inmediato.

Y Felix no era la excepción, ¿trae un regalo? ¡Maldición, él trae un regalo!

— ¿De qué hablas?— Pregunto Felix cuando vio a Nayeon pasar a su lado, la chica se detuvo de inmediato y mira hacia Felix, para luego mirar con asombro hacia la entrada.

Señaló hacia allí y Felix miro, efectivamente, aquel regalo en manos de Changbin, era una caja de tamaño mediano algo plana, además de una rosa blanca, ¿para quién sería aquello?

— ¿Vez esa caja en sus manos?— Felix dio un asentimiento, —Significa ¡Que es una emergencia!

Y de nueva cuenta Nayeon salió corriendo para seguir alterando a todo el alumnado.

Felix soltó un suspiro, Changbin se veía demasiado bien, sus cabellos perfectamente peinados, esa sonrisa que dejaba a más de uno flechado, sus ropas que lo hacían ver como el chico más perfecto en todo el maldito mundo, Felix apartó la mirada negando con la cabeza, debía dejar de pensar en aquello, aunque debía admitir que le daba cierta curiosidad el regalo.

Se supone que Changbin no ha prestado atención a nadie en la universidad, al chico no se le han conocido ningún tipo de romance, algunas chicas presumían que habían salido con él, y obviamente después eran negados aquellos rumores, así que Felix no estaba para nada seguro.

Término de guardar algunas cosas para cerrar su casillero, miro el reloj en su muñeca, tenía que apurarse no quería llegar tarde a clases.

— ¡Te dije que no quiero ir!— Felix lo que menos quería era asistir al convivio que tanto exigía Jisung que fuera, —Ya te di tu regalo, déjame ir.

—No, esta vez no, Felix— Jisung por fin soltó a su amigo, ya estaban a pocos pasos de llegar a la facultad de medicina, — ¿Crees que con snickers me convenciste?

—Son tus favoritos, pensé que funcionaría.

Jisung sonrió, sí que le gustaban, pero no permitiría que Felix se fuera además de que tenía que darle su regalo a su amigo.

—Bueno, de todas formas debes acompañarme, el regalo que te daré está en mi casillero.

Felix soltó un suspiro, bien, se rendirá, solo por hoy, nada más.

Por fin ambos continuaron su camino, al por fin entrar al edificio principal, pudo ver de todo, había varias decoraciones de corazones rojos, rosas y bancos, todo indicaba demasiado amor, Felix se sintió incómodo al ver tantos colores tan llamativos y que según representaban todo el romance del mundo, lo que a él no le parecía mucho.

—Ven— Jisung de nueva cuanta tomó su muñeca para arrastrarlo hacia su casillero, cuando llegaron de inmediato Jisung lo abrió, y agarro lo que buscaba, —Espero te guste.

Felix miro la pequeña caja en forma de corazón, con cuidado la abrió, y sorpresa ¡trufas de chocolate!, definitivamente le gustaba aquello.

—Te luciste, Jisung— dijo Felix con una sonrisa hacia su amigo, —pero la caja no me convence—.

— ¿Entonces no quieres que seamos novios?— Jisung fingió estar dolido, colocó su mano en su pecho mientras hacía gestos adoloridos —Justo en mi amor por ti, Lee Felix.

— ¡Ya!— Felix le dio un leve empujón a lo que Jisung sonrió, — ¿Tenemos que ir al convivio?

—Si.

De inmediato Felix rodó los ojos, no le gustaba ir a esos eventos, pero solo esta vez, al fin y al cabo no era para tanto, o eso es lo que pensaba.

Es gracioso que de ser yoonbites pase a ser jeonbites que suena bastante parecido

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