• Uzui Tengen

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Clasificación: One-shot









▪ TANABATA ▪

"Y aunque no estés, estás"











Luego de varios años lo habían logrado y ahora además del sustento tenían la oportunidad de disfrutar de un gusto adicional de vez en cuando, el trabajo de su padre al fin dió frutos permitiendo dar a su familia lo que siempre quiso y más, ai bien no eran las personas más adineradas de todo Japón pero se sentían agradecidos con toda bendición que recibiesen. Antes de todo no tenía tiempo para nada ni siquiera para sí misma; desde antes de que los rayos del sol se hiciesen presentes hasta que un manto oscuro cubriese el cielo llenándolo de estrellas el trabajo la consumía hasta dejarla profundamente dormida hasta a veces sin cenar cosa que a su corta edad era además de lamentable una tarea que no le correapondía y sin embargo siempre daba lo mejor.

Pero ahora todo eso se había ido, era un momento del pasado que solo se haría presente en sus recuerdos otorgándole ahora más momentos tanto en compañía de su familia como tiempo para ella misma donde luego de tanto pudo retomar aquello que amaba, en donde las horas se le acortaban sin importar el día o el lugar, aquellos preciosos bordados por los que era tan conocida poniendo una idea en su cabeza, tenía un talento reconocido que le podría ser útil para dar algo de dinero extra a su familia y así ocurrió, todo aquel que escuchaba que tales obras de arte eran creadas por sus manos tenía una pieza única e irrepetible garantizada.

Era lo mejor que hacía y a diario recibía el más sincero agradecimiento de parte de sus padres; luego de pasar un día enfocada en sus actividades un baño antes de dormir relajaba su cuerpo por completo.

Era de una familia acomodada, sin embargo cada noche tomaba una caminata hacia el río más cercano para obtener el agua que necesitaba, su pueblo era pequeño y alejado privándolos de tuberías o cosas similares que solo podían tener las adineradas familias de la ciudad.

El viento soplaba desordenando con suavidad las hebras que caían por sus hombros mientras caminaba siendo guiada por la luz de la luna desde arriba, hizo a lo que iba y sin perder el tiempo aceleró el paso regresando a su hogar pero se maldijo a sí misma por ser tan confiada, ¿cómo pudo olvidar una cosa así? Apretó sus ojos al sentir como era tirada hacia atrás con violencia mientras el balde en sus manos se rompía al impactar con fuerza en el suelo, esperaba con sus gritos recibir la ayuda de alguien más pero el llanto no tardó en salir al ver como de las casas aledañas ignoraban su llamado apagando las luces.

Por más que intentase defenderse y salvar su vida el ser sobre la muchacha duplicaba su fuerza y tamaño burlándose de ella al ver sus inútiles movimientos. Su labio temblaba aguantando su llanto, estaba enojada consigo misma al morir de una manera tan estúpida por causa de su imprudencia; aceptaba su final arrepintiéndose por cada falla cometida pero luego respiró en paz, su cuerpo dejó de ser lastimado y logró sentarse pero de escapar la frenó la esena frente a sus cristalinos ojos de una figura alta y fuerte acabando con aquella criatura al clavar un par de enormes cuchillas en el cuello de este convirtiéndolo en cenizas. Unos resplandecientes orbes fucsia se posaron en ella.

De apariencia llamativa y demasiado extravagante para su gusto el joven peliblanco se acercó a la chica, parte de su trabajo era asegurarse que cualquier sobreviviente al ataque de un demonio se encontrara bien. Sus manos temblaban, el miedo aún no abandonaba su cuerpo pero al ver la cálida sonrisa que el mayor le dedicaba los colores se le fueron al rostro, tomó ambas manos de la chica y la puso en pie.

--Me alegra haber llegado a tiempo, lo mejor que puedes hacer ahora es volver a tu casa.

La zona concurrida por la chica había sido acechada por demonios últimamente, razón la cual ella ignoraba pero por la cual la presencia del varón estaría desde hoy hasta que no quedase ninguno dándole más confianza y seguridad a la fémina quien antes de irse agradeció al chico haberla salvado y su encuentro al ir al río se covirtió en costumbre conociendo más uno del otro en los momentos donde aprovechaban para conversar.
Asi como se hizo rumor por todo el lugar sobre los demonios se hizo por la llegada de aquel cazador y se creó uno nuevo al ver como la joven se unía a él cada noche en su guardia cosa que las personas no entendían mal interpretando todo el asunto.

Su nombre era Tengen, uno de los 9 espadachines más hábiles entre los Cazadores de Demonios y al igual que su nombradía su imágen no paraba de rondar por la cabeza de la chica todo el día; no podía pensar en otra cosa aue no fuese él asombrándola de lo rápido que se había dejado enamorar en tan solo unos meses al igual que él que contaba los minutos esperando el anochecer para tenerla de nuevo entre sus brazos y todo hubiese sido perfecto pero el uno al otro bloqueaba tanto sus pensamientos que los llevaron a distraerse en sus trabajos teniendo varias llamadas de atención que lograban avergonzarlos. El varón por parte de sus superiores y la joven por parte de su padre quien se preocupaba al no saber la razón que llevaba a distraer tanto a su hija pero que no tardó mucho en llegar a sus oídos.

Estaba fúrico, no podía creer como todo este tiempo un hombre le había estado lavándo la mente con sus estupideces según él, era la hija mayor y pese a ello sus expectativas eran altas respecto a la pareja que eligiese algún día y al enterarse que un simple cazador había logrado enamorarla le molestaba demasiado, creía que ella merecía algo mejor a lo cual decidió tomar cartas en el asunto. El llanto de su hija ante su prohibición y las charlas con su esposa al respecto le hicieron reconsiderar haciendo que ambos pudiesen verse unicamente 1 vez al año el séptimo día del séptimo mes.

Creyó que el tiempo lo haría olvidar pero no fue así, su órden siguió igual por 5 años pero aún así agradecía poder pasar con ella esa única noche observando cada vez que la veía como de una joven muchacha se convertía en la mujer más hermosa.

Jamás quiso que alguien dañase a su hija y al ver como él mismo fue el causante de tantas lágrimas y dolor en su pecho lo hacía repudiarse a él mismo, solo quería que en realidad fuese felíz pero logró todo lo contrario hasta que luego de conversar seriamente con la joven ambos se sintieron mejor, después de tanto tiempo enojados se abrazaron fuertemente mientras ella no dejaba de agradecerle prometiendo no descuidar su atención sobre nada.

Luego de una reunión con el Patrón se sentía cansado, quería irse y no saber sobre nada, no sabía si rendirse o si seguir tachando en el calendario cada día que faltaba para esa fecha porque cada día que pasaba lo invadía un dolor horrible pero luego salió y la vió; a una distancia algo lejana a él, creía estar alucinando hasta que sus labios uniéndose con los de ella le señalaron estar en la realidad donde estaría nuevamente a su lado haciendo verdad lo que hace solo días era un sueño para ambos.









Otro nuevo uwu hasta ahora los Pilares que me comienzan a agradar un poco más son Rengoku y Uzui pero a ver que pasa cuando lea el manga.

No se si lo notaron pero desde el último shot de Giyuu hasta el siguiente a publicar están basados en leyendas japonesas de amor (porque las amo) y espero les haya gustado :3

¿Quién será el siguiente Pilar? 7w7



《KIMETSU NO YAIBA》TYPE OF • ONE SHOTS • ESCENARIOSWhere stories live. Discover now