Cartas a Rei [ Enjirei ]

Tercera Carta

Hola Rei

¿Que tal estás?

Lamento no haberte enviado una carta  la semana pasada, a pesar de haberme convertido en el N°1 han pasado muchas cosas de las que me debo encargar.

Aún así aparte un poco tiempo para escribirte de nuevo, además de salir para elegir un regalo en conjunto con las flores.

Si recibes esto ya te habrás dado cuenta que es una pequeña caja, sé que no te gustan las cosas llamativas y exuberantes, por ello, estuve un buen rato meditando en lo que sería algo perfecto para tí.

Espero que mi elección haya valido la pena.

Si en este punto ya lo abriste de seguro habrás reconocido de dónde saqué el obsequio, y si te preguntas la razón por la que elegí esto es muy sencilla: Quería recordar algún momento en que fuimos honestamente felices juntos.

Además de que va muy bien con la flores y estoy seguro de que tú entenderás el porqué.

En cuánto a mi vida diaria, no te mentiré, en mi mente viajan muchas preguntas sobre lo que debo o no hacer, después de todo he cometido muchos errores con ustedes pero así como yo los causé, yo mismo los he estado enfrentando solo uno por uno.

Por qué es mi deber aceptarlo todo.

...

Esto sonará un poco extraño para ti, además de que no tengo el derecho a hacerlo pero ¿Puedo pedirte algo?

No me importa que dudes sobre mi puesto como héroe o padre, pero de entre todas esas cosas... lo único que deseo en estos momentos es que jamás dudes de mi honesto deseo de querer arreglar mi futuro con ustedes.

Si al menos puedes confiar en mí promesa, me consideraré afortunado.

Con esto dicho, me despido.

Cuídate Rei.

[...]

No sabía cómo sentirse esta vez la hermosa mujer albina.

Si las flores la sorprendieron en su momento, el regalo que le envío esta vez lo superó en demasía.

¿Quien iba a pensar que el gran Endeavor fuera un detallista de primera? Ni ella misma se lo creía.

La pequeña caja se trataba nada más y nada menos que un recuerdito que podrías conseguir en una de las tiendas de recuerdos. El detalle es que, para ella, no era cualquier objeto, mas bien se trataba de un tallado probablemente a mano del lugar donde tuvieron su primera cita: un parque tradicional japonés.

La pintura y los detalles con los que fue recreado el lugar le parecieron impecables, y con una pequeña capa de esmalte para darle brillo y vida a la réplica del lugar.

Enji no mentía, iba muy bien con las flores.

Y Rei tampoco se iba a mentir, se sintió conmovida por los detalles que con esmero se dedica a remarcar en cada carta que le envía.

Pero así como la hacía feliz, también hacía dudar su corazón.

Era consciente de lo que le había hecho en el pasado, pero tampoco podía ignorar todos los actos que ha estado haciendo, después de todo ella sabía que el Enji que conocía nunca haría eso. 

¿Tanto había cambiado como para reconocer sus errores?

La respuesta era más que evidente.

— ¿Debería responder las cartas? — Rei comentó en voz alta.

—¿Responderle a quien mamá? — La voz de uno de sus adorados hijos la saco de su ensoñación, está vez se trataba de Natsuo que de seguro había hecho espacio en su ajetreada agenda universitaria para ir a verla.

La mujer le sonrió con dulzura al verlo — Natsuo cariño ¿Cómo estás?

— Yo muy bien — le sonrió de vuelta — ¿Y tú?

— mejor que nunca — comentó — ¿Fuyumi no vino contigo?

— Dijo que tenía que terminar unos informes escolares, ya sabes, cosas de maestros — explicó — de todas maneras dijo que apenas terminara vendría de inmediato así que no tienes que preocuparte. — Ella asintió riendo por lo bajo. Las clases habían vuelto a iniciar así que estaba consciente que su hija mayor no iba a poder visitarla tan seguido como antes. Le entristecía, pero no podía hacer nada por ello. — ¿Entonces?

— ¿eh? — la mujer no se había comprendido que quería decir. 

— Cuando llegué dijiste algo de responder una carta, creo ¿Te referías a las de Shoto?

Había olvidado ese detalle, últimamente estaba siendo descuidada con sus propios pensamientos. 

Al igual que Fuyumi, pensó en decirle la verdad sobre lo que su padre estaba haciendo en secreto, pero termino en la misma conclusión que antes: Era mejor ocultarlo, especialmente de Natsuo que en el fondo aun tenía un pequeño -gran- rencor por el hombre.

Y de igual manera que lo hizo con su preciosa hija, volvió a ocultar los detalles.

— Shoto me comentó que pronto volverá a hacer las pasantías, después de que le den su licencia de héroe. — pudo ver la cara de su hijo cambiar, una de sorpresa y luego a una seria para terminar desviando su mirada.

—... Probablemente va terminar haciendo la pasantía con el viejo.

Su madre rió por lo bajo — ¿ Y consideras eso algo malo? 

Natsuo se quedó callado por unos segundos — No lo sé. 

— En ese caso no tienes qué preocuparte — respondió — Shoto no es tonto, si elige la agencia de tu padre es porque esta consciente que es lo mejor para él. 

— Pero es- 

— Natsuo — Habló Rei esta vez firme con sus palabras — Para ser alguien que se lleva mal con su padre, piensas mucho en él ¿no crees? 

Esas palabras fueron como un balde de agua fría ¡de forma indirecta le estaba diciendo que pensaba en su padre! se puso nervioso y comenzó a negar con fuerza lo que dijo su madre. 

— ¡N-No es eso, estas mal interpretando todo! — su reacción solo hizo reír a la mujer, porque justo había reaccionado como se imaginó — D-de todas maneras ¿Qué es ese regalo que tienes ahí? ¿Acaso Shoto tiene permitido enviar objetos o algo? 

Estaba más que claro que su hijo lo hizo para desviar la conversación, pero el que mencionara sobre el regalo de su padre fue algo que no esperó. Aun así ella lo único que hizo fue sonreír  y responderle una simple frase que sorprendió a su hijo.

— Es un secreto.

Notas de la Autora:

Ah~ Enji esta aprendiendo a improvisar sus palabras y detalles para transmitirle lo que siente a Rei  (aunque ni el mismo sepa como jajaja)

Debo decir que esta familia es complicada de escribir, pero eso es lo interesante ¿no? ver como todos buscan la manera de seguir adelante con su vida.

Espero que le haya gustado lo que llevo hasta ahora~ 

No olviden, votar y comentar~

¡Nos vemos!