El Último Hijo de Primus

Capitulo 9 🐝 Caída roja🐝

Cybertron, Subterráneo, bahía médica. Coordenadas desconocidas.

PV Wasp

¿Qué pasó? ¿Por qué no estoy muerto? ¿Cómo llegué aquí? El recuerdo de Megatron desgarrando mi chispa seguía muy presente en mi procesador, era lo último que recordaba. Había sido como cerrar los ópticos por unos segundo y al abrirlos estar en un lugar completamente distinto. El dolor que sentía desapareció de golpe, al igual que el sonido de la voz de Megatron.

Miré a Queentessa nuevamente: —Tengo que salir de aquí. — Pensé. Guardé mi cable de interfaz y cerré la rejilla protectora.

Traté de ser lo más silencioso posible cuando caminé hacia la puerta. Era peligroso que Queentessa despertara. En el pasado, fingió amarme para poder llegar a mi padre y tomar su control. Afortunadamente no lo logró, si no habría podido tomar el control sobre los Autobots y manipularlos a su antojo. Sabía que nuestros guerreros eran fieles a la causa, eran fieles a mi padre, ejecutarían toda orden que les diera... y no sabrían que estaba siendo controlado.

Nos las arreglamos para vencerla, fue difícil porque consiguió a Megatron como aliado, pero lo logramos... a un precio alto.

En esa batalla perdí a mi madre.

Fue difícil, pero nos levantamos, avanzamos. Papá estaba asustado, sabía que Queentessa volvería en cualquier momento, así que tomó una decisión difícil. Mandamos a Hot Rod lejos de la galaxia. Elegimos a 5 de nuestros mejores guerreros y a otros 20 soldados para cuidarlo. No perderíamos a un integrante más de nuestra familia, menos a un niño. Yo era joven, pero no tanto como mi hermano, me encontraba a finales de la adolescencia y Rody apenas era un infante.

Fue extraño no escucharlo jugar o corretear por ahí, pero sabíamos que valdría la pena. Sin embargo, aún con Rody lejos y siendo protegido las 24 horas, pude apreciar el miedo en los ópticos de papá ante la posible resurrección de Queentessa. Fue entonces cuando entendí que era un rival aún más peligroso que Megatron.

Acerqué mi mano al botón de la puerta y lo presioné, saliendo con pasos silenciosos y asegurándome de que la puerta se deslizara lentamente a la hora de cerrar. Una vez fuera, aumenté la velocidad con cada paso. Tenía una idea de donde estaba, pero no me encontraba cien por ciento seguro. No tenía otra opción, así que usé los mapas del subterráneo de Cybertron que descargué hace tiempo.

— :(Bumblebee, ¿dónde estás?):

Frené de golpe al escuchar esa voz...

Wasp: (¿Sire?): —

Mis pupilas se encogieron y pronto solo pude ver un panorama blanco mientras sentía que me jalaban por la espalda y me desvanecía, cayendo en total inconsciencia.

Pv Bee

Abrí los ópticos solo para darme cuenta de que estaba parado en medio de un pasillo en quien sabe dónde. ¿Cómo llegué aquí? mi último recuerdo era el de Queentessa abrazándome después de que me sobrecargué por tercera vez.

Optimus: :(Bumblebee, manda tu ubicación, estamos en camino.):—

Parpadeé un par de veces tratando de procesar la información. Voz profunda, tranquila, estoica...

Bee: :(¡SIRE!): — Grité con alegría. — :(¡Repondiste! ¡Al fin!): —

Optimus: :(A mi también me alegra, hijo, pero en verdad necesito tus coordenadas): —

Bee: :(Okey): — Revisé mi brújula, encontrando la respuesta. — :(No entiendo nada): — Dije mandando las coordenadas.

Optimus: :(Sé donde es, no te muevas): —