PERFECTION IS SO...

capitulo 19

Capitulo 19

Subimos a mi piso y abrí la puerta.

-sorpresa-. Gritaron mis padres, Bruce, Tom, amigos de Newport, amigos del instituto, Martha, Larry, Andy. Cole.

-Dios mío-. Fue una real sorpresa. Todo estaba decorado con globos y serpentinas. Lo habían planeado todo. El día entero con Ro. Las no llamadas de Cole.

Cole se acercó a mí.

-feliz cumpleaños, hermosa novia-. Me dio un beso y se lo devolví.

-no llamaste por días-. Dije una vez apartados.

-eso le ponía emoción a la sorpresa.

-malo-. Dije entrando.

-¿Cuándo llegaste?

-anoche.

Todos caminaron hacia mí y comenzaron a felicitarme.

“feliz cumpleaños, Blake” decían todos.

-vamos a celebrar con champagne-. Mi madre tenía la botella en sus manos.

Una vez con las copas en las manos, di las gracias.

-no puedo creer que estén todos aquí. Gracias por acompañarme, es una muy grata sorpresa. Gracias a mis amigos del instituto por acompañarme, tanto tiempo sin vernos. Gracias a mis chicos de Newport Beach. Mami, papi, son mi motor a diario. Ro, mi dulce chica, no sabes lo mucho que significas para mí. Tía Martha, tío Larry, gracias por cuidar de mí. Andy, me haces feliz al hacer feliz a mi chica. Bruce, gracias por los mimos y consejos. Tom, gracias por hacerlo feliz. Cole, mi amor, espero toda una vida a tu lado. Los quiero a todos. Gracias.

Aplaudieron y brindamos. Me acerqué a Bruce.

-vamos a mi cuarto los tres-. Tom estaba ahí-. Un regalo de bodas les espera.

-espero que cuatro meses de espera hayan valido la pena-. Bromeó Bruce.

-Veras que sí-. Le guiñé un ojo.

Entramos a mi habitación y me acerqué a mi tocador, agarré un sobre y se lo entregué.

-Bruce, gracias por venir cada vez que te llamo sin poner peros, por estar conmigo siempre. Por aguantar cada vez que pido un cambio de maquillaje o peinado por más difícil que sea.

Abrió el sobre y lo leyó. Era un viaje a París una semana. Él y su esposo.

-lo aparté hace unas semanas-. Continué-. No te lo había dado porque estaba con mi cabeza en otro lado por Cole-. Rió pasándole el sobre a Tom-. Espero que lo disfruten mucho-. Sus ojos tenían lágrimas.

-mi chica favorita-. Dijo abrazándome-. No sabes cómo te lo agradezco. Esto es demasiado. Es maravilloso.

-Blake, gracias. Eres un ángel-. Tom se unió al abrazo.

Cole entró a mi habitación aclarando su garganta.

-¿hay espacio para mí?-. Preguntó

-todo el que quieras-. Bromeó Tom.

-mira lo que tu novia nos ha dado-. Bruce le entregó el sobre

-felicidades. Espero lo disfruten.

-lo haremos.

Bajamos y nos unimos a la celebración. La música no podía ser muy alta, pero igual disfrutábamos al ritmo de Jay Z y Alicia Keys con Empire State Of Mind.

A la media noche todos comenzaron a irse, quedando mis padres, los de Ro, Andy, Cole y yo.

-tenemos un plan, Blake. Técnicamente ya no es tu cumpleaños ya que es otro día-. Mamá estaba feliz-. Pero igual es un plan por tu cumpleaños.

-dilo ya-. La apresuré.

-iremos a Corono Del Mar State Beach.

-Newport-. Susurré

-sí-. Afirmó-. Haremos una fogata y cualquier otra cosa.

Al día siguiente estábamos en mi querida Newport. A las ocho en la noche, fuimos a la playa. Cuando fueron las diez armamos una fogata. Comíamos malvaviscos y bebíamos vino.

Viendo a mi alrededor, veía una vida perfecta. Cole me había enseñado que los amigos y la familia eran la perfección que necesitaban las vidas de todos.

Mis padres se miraban con corazones brotando de ellos. Los padres de Ro eran más discretos, pero se querían mucho. Ella y Andy no paraban de reír de cualquier cosa que estuvieran hablando y yo estaba en medio de las piernas de Cole.

-¿en qué piensas?-. Me dijo al oído.

-en ti-. Me besó el cuello.

-¡qué gusto!

Si la vida me diera la decisión de cambiar algo, no cambiaría nada. Teniendo la vista que había en frente de mí, sentía que no había nada mejor. Me gustaba estar en la playa con Cole. En una de esas me había dicho que me amaba por primera vez. Las playas nos unirían por siempre algún día. En una de esas me quería casar. Con él.

-te quiero tanto, chico-. Lo miré a los ojos.

-y yo a ti más, chica.

-siento mucho que tus padres no estén aquí.

-no sabes lo bien que la están pasando allá. Les encanta Inglaterra. Siempre han querido vivir allá, pero nada los unía a dicho país. Ahora los negocios los ha hecho ir y no creo que vuelvan en un tiempo.

-eso es una buena noticia.

-¿no doy siempre buenas nuevas, amor?-. Sonreí.

-eso creo.

-hey Cole-. Llamó Andy-. Vamos a meter a este par a la playa.

-no-. Gritamos Ro y yo.

Cumplieron su cometido. El agua no era cálida, pero tampoco congelaba. Casi llegaba el verano y yo lo ansiaba para viajar con Cole.

-son unos animales-. Dijo Ro saliendo. Andy la alcanzó y volvió a meterla. Reímos.

-no saldrás, hermosura-. Le dijo al oído.

Tirándonos agua los unos a los otros, el tiempo pasaba rápido. Habría una fiesta en la playa a la noche siguiente y estaríamos ahí. Tendríamos que descansar ahora.

Tan cansada como estaba, me quedé dormida al lado de Ro. La hermosa rubia me abrazaba como si yo fuese a correr en algún momento.