Otra historia (Sasuke x Hinata Male) (YAOI) EN EDICIÓN

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Hinata veía asombrado las calles de aquel clan, con solo entrar el pudo sentir un aura poderosa y eso lo intimada además de que el hecho de que todos murmuraban cosas cuando veían que era un Hyuga, no ayudaba mucho; pero a pesar de todo sonrió al ver como la mayoría saludaba a Itachi y a Sasuke, ellos los respetaban y Hinata notaba que a su manera ellos eran felices en su clan, pero también se dio cuenta de que el clan Uchiha literalmente se encontraba apartado de la aldea, lejos de prácticamente todo, tuvieron que caminar mucho para llegar. 

Por supuesto que el chico Hyuga no era consiente de esta situación y tampoco era como si supiera algo, no había manera de que pudiera conocer la historia del aislamiento de uno de los clanes más poderosos de Konoha, pues  después de todo era un tema que se consideraba tabú. 

Llegaron a la casa de Itachi y Sasuke, deteniéndose un momento como si se estuvieran armando de valor para entrar, y es que no era para menos, Uchihas y Hyugas eran rivales, sus poderes oculares eran secretos que debían mantenerse lejos de sus "rivales" y el hecho de que estuvieran llevando a el hijo mayor del líder del clan Hyuga a la casa del líder del clan Uchiha era una situación que estaba destinada a fracasar. 

Finalmente Itachi se armo de valor y se adentro en su hogar siendo seguido por los dos infantes, al quitarse los zapatos escucharon la voz de su madre pidiéndoles que se lavaran las manos pues la comida estaba lista; Hinata sintió un extraño cosquilleo al sentir el ambiente tan hogareño de ese lugar, mezclado con un poco de melancolía que lo envolvió al oír la ternura en la voz de la mujer.

—¿Qué esperas? Andando — dijo Sasuke sacando de sus pensamientos a su amigo y sujetándolo de la muñeca para hacer que caminara. 

En lo que los menores se lavaban las manos, Itachi se encargo de hablar primero con su madre, la cual acepto encantada y lo tranquilizo diciéndole que ella se encargaría de calmar a Fugaku y que tratara de que pusiera su mejor cara para no asustar a el niño Hyuga.

El pequeño niño se presento asustado en el comedor, en donde la comida se encontraba ya servida y donde solo faltaba el líder del clan Uchiha; Mikoto se acerco al pequeño y con una sonrisa se presento, logrando calmar al menor con su dulce voz.

—Sasuke me ha hablado mucho de ti —le dijo con una sonrisa.

—¡Mamá, no digas eso! —dijo Sasuke con un sonrojo en su rostro. 

— Yo soy, Hinata Hyuga— fue lo que salió de sus labios con tartamudeo y de igual manera se sonrojo al ver que Sasuke hablaba mucho de él. 

La mujer hizo que se sentara a lado de Sasuke.

— ¿Sabes? yo conocí a tu madre, por desgracia solo de vista— contó la Mikoto en lo que esperaban a Fugaku. 

Hinata sonrió al escuchar sobre su madre, pues su padre dejo en claro que mencionar a su esposa fallecida estaba prohibido. 

— La verdad, te pareces mucho a ella — le dijo la mujer con un sonrisa en su rostro

El niño de ojos perlados se encogió en su lugar mientras sentía como sus ojos querían derramar lagrimas, pues era la primera vez que le decían esas palabras sin odio mezclado en la voz, sin miradas de decepción o desprecio.

Pero el momento se vio interrumpido cuando Fugaku llego al comedor y de inmediato sus ojos se posaron sobre Hinata; aunque antes de poder decir algo o hacer alguna expresión facial, su esposa lo tomo del brazo con cuidado y lo llevo fuera del comedor. 

Fue un momento un poco incomodo, pero Hinata estaba acostumbrado.

— Tu casa es muy bonita— fue lo que le dijo a Sasuke mientras esperaban.