『Si estuvieras en...』

v lives

Usualmente te colarías en las transmisiones de los demás o ellos en las tuyas.

...

Por fin pudo estirar todo su cuerpo cuando cayó sobre su cama, su grabación recién había terminado una horas atrás y apenas llegaba a los dormitorios. Sentía que había llegado al paraíso.

Haciendo un esfuerzo se sentó en el centro de su cama sacando la blusa por su cabeza y tirándola sobre el escritorio siendo seguida de sus vaqueros. Ya luego lo recogería. Entonces se puso de pie buscando en el closet y sacando una de las grandes camisetas que en su momento pertenecieron a Yugyeom dejando que esta la cubriera casi hasta las rodillas, acto seguido metió sus manos por la prenda para soltar los pequeños ganchos de su sostén y sacarlo por un costado.

Ahora si se sentía en el paraíso.

Volvió a recostarse en la cama muchísimo más cómoda que al principio, estirando una de sus manos para tomar su celular de la mesita de noche, notó todas las notificaciones y trató de contestar a los mensajes que sabía que no despertarían a nadie, pero uno de estos mensajes llamó su atención. Soltó una risita al ver cómo la aplicación seguía notificándole cuando alguien se encontraba haciendo una transmisión en la cuenta del grupo.

Sintió tanta curiosidad en cuál de los chicos estaría transmitiendo a las 3 de la madrugada que, luego de responder sus mensajes, dio un toque a la notificación mientras se acomodaba en la cama viendo como casi al instante el rostro del líder aparecía en la pantalla de su celular. No pudo evitar sonreír pensando que lucía casi como si encontraran haciendo una videollamada, solo que él no podía verla, ni sabía que ella lo estaba viendo.

Este se encontraba recostado igual en su cama y lo escuchó respondiendo a una pregunta de algún fan, su cabello ahora largo cubría parte de su rostro en compañía con su colcha blanca que tapaba casi hasta su nariz.

Sonrió cuando una idea surgió en su mente. Sin pensarlo mucho salió de la aplicación, bloqueando el celular para dejarlo sobre la almohada y ponerse de pie con rapidez.

Salió de la habitación y camino por el pasillo con sumo cuidado de no despertar a los demás, hasta que llegó a la puerta del líder. Con la misma delicadeza giró la perilla tratando de no ser escuchada pero en el momento en que asomó la cabeza por la puerta, Jaebum ya se encontraba observándola.

Ambos se quedaron mirándose por unos segundos con ganas de echarse a reír.

—Hola —dijo con una risita entrando por completo a la habitación bajo la mirada del líder.

Corrió en puntillas hasta lanzarse sobre la cama—. ¿Qué haces? —preguntó riendo al verla escabullirse por debajo de la colcha hasta aparecer justo al lado de su cabeza.

— ¡Hola! —repitió ahora con mucha más emoción viendo la pantalla.

—Disculpa, ¿tú no deberías estar durmiendo? —preguntó riendo mientras giraba levemente su rostro para observarla.

—Tú también —le dijo de regreso sonriendo victoriosa—. Además extraño a ahgase.

Jaebum tan solo negó con la cabeza manteniendo su sonrisa al tener la barbilla de June sobre su hombro, tratando de evitar apretar sus mejillas entreteniéndose en leer la gran cantidad de comentarios que comenzaban a subir rápidamente.

Claro que esperaba los comentarios sobre los dos juntos.

—"June luce como una bebé" June es una bebé —responde luego de leer en voz alta la pregunta, haciendo un gran énfasis en la palabra "es".

— ¿Soy una bebé? ¿Hum? —ambos rieron ante su tono de aegyo, volviendo aún más locas a las fans al ver cómo los ojos del líder parecían a punto de desaparecer por sonreír tanto— ¿Soy tu bebé, oppa? Junie quiere comer helado.

Ahora si tuvo que poner la mano libre sobre su boca para cubrir su carcajada llevándola hacia el cuello de la chica para apretarlo y sacudirla.

—De verdad necesitas dormir —afirmó tratando de cambiar de tema para lograr calmarse un poco.

—Bien —dijo esta sin más acurrucándose más hacia él a la vez que enrollaba sus brazos en su torso y escabullía su cabeza hacia su pecho—. Buenas noches, oppa.

Absolutamente todas las fans que se encontraban viéndolos notaron como los colores subían al rostro de Jaebum mientras se despedía con la mano justo antes de terminar la transmisión. 

¡Hola, bebés!

He estado más desaparecida que el cometa Halley, pero espero poder seguir escribiendo esta historia si ustedes también la disfrutan tanto como yo. Además de que no faltarían muchísimos capítulos para terminarla y quién sabe, quizás pueda cumplir con su deseo de un segundo libro.

Para saber cuánto apoyarían una continuación, quisiera que comentaran qué grupos desearían ver en el otro libro. Estaré pendiente de los comentarios.

Ahora sí, ¡hasta la próxima, mis bellezas!