La venganza. Darkar x Mecoboy

Capitulo 20: "¿Este es nuestro Final?"

-La comida esta lista.-Andrew coloco la pizza en la mesa del patio de la casa, donde iban a celebrar el día de campo.-Cariño, ¿puedes pasarme los vasos?

Andrea estaba concentrada viendo como Darkar jugaba con su bebe al avión. Su hermano era definitivamente otra persona. Trataba a Andrea como una diosa, no se atrevía a ignorarla, y mucho menos a lanzarle un insulto. Conversaba de buena manera con Andrew, sonreía amablemente a su sobrino, Joshua. Incluso trataba a Verónica como el amor de su vida. La llenaba de detalles todos lo días, le preparaba el desayuno, le escribió muchas canciones y a cada momento le andaba dando un beso.

-Cielo, ¿Estas tan decepcionada como yo?-Preguntó Andrew.

-Solo han pasado tres meses.-Respondió Andrea.-El doctor dijo que los primeros tres meses Darkar iba a sufrir de pequeños fragmentos que iban a tender confundirlo. Pero no lo parece.

-Míralo, es feliz. Es lo que importa, ¿No?

-Claro, pero....-Lo miró.-No paro de pensar en Mecoboy, y en lo que ese maldito este haciéndole en estos momentos.

-Pero el tiene razón, Andrea. Hay que respetar el trato, él no está en sus vidas, ustedes no estén en la suya, yo lo apoyo.

-¿Hice lo correcto?

-No, claro que no.

-Hermana, ¿Por qué tan pensativa?-Darkar le tomo un mechón que estaba cubriéndole el rostro.-¿Te sientes bien?

-Si, si, estoy bien.

-¿Me acompañas? Voy a buscar unos platos.

-Claro.-Ella se levantó.

-Hermana, he tenido sueño extraños.-Comenzó a hablar apenas cerraron la puerta corrediza.-Veo a un chico, siempre es el mismo. Tiene el pelo blanco y sus ojos son azules. ¿Lo conoces? O...¿Yo lo conocí?

-No lo conozco. Y estoy segura que tú tampoco.

-Su nombre empieza con M, no lo recuerdo.

-Darkar, ¿Cuándo te mudaras a la casa que compraron?-Cambio rápidamente el tema.- Tu departamento es muy pequeño para ustedes.

-Voy a terminar de empacar esta semana, prometo avisarte si es lo quieres.-Tomo los platos mientras sonreía.

-Lo único quiero que te vayas de esa casa lo más rápido posible.

-Lo dices como si ahí estuviese la clave para  recordar algo que tu no quieres que recuerde.-La dejo consternada.-Hermana paranoica.-Acaricio su cabello y se fue.

-¿Cómo te sientes?

-Supongo que Bien.-Darkar levanto las cajas que estaba preparando, se dio la vuelta, miro a Andrea, le sonrió y camino hacia la puerta.-Pero tengo un sentimiento extraño, es como si no quisiese irme.

-Solo son sentimientos tontos, hermano.-Se acerco.-Vamos, termina para que nos vayamos, ¿Quieres?

-Eh, si.-Llevo las cajas a la puerta.-Solo falta unos pocos días, y me mudaré....Totalmente.

-¿Quieres una bebida?-Camino hacia la cocina.-¿Un refresco o agua?

-Dame un vaso de agua, por favor.

Darkar pretendía levantar una caja que Verónica había arreglado con cosas que estaban en su cuarto.Pero algo brilloso llamo su atención. -¿Y esto?-Quito el papel de regalo brilloso y abrió la pequeña caja, dentro había una cadena.

-¿Una cadena?-Debajo de la cadena, yacía un pedazo de papel pequeño. Que decía: "De su mejor amigo, para el amor de mi vida. Pedazo de mierda, te amo.

Continuo revisando la caja, encontró ropas suyas. Saco todo, dispuesto a ver algo que le ayudase a recordar algo. Y solo pudo ver una pequeña foto al fondo.

Era un joven albino, de cabellos blancos y lacios. Sus labios eran rosados. Aparentemente en aquella foto parecía tener unos quince, estaba sonriente. El nombre estaba tachado, no podía ver con claridad el nombre. Debajo encontró otra foto, era el mismo chico, pero esta vez....Estaban juntos.

El lugar donde fue tomada le resultaba familiar, pero no podía descifrar donde era exactamente. Era un lugar lleno de luces y de un ambiente bastante agradable, en el fondo se podía visualizar una especie de recepción como la de los restaurantes, estaba el abrazando al joven albino de la foto anterior.

Su pelo estaba corto y despeinado medio cubierto por una gorra oscura y su aspecto parecía de un  inmaduro. Usaba un suéter a rayas y unos pantalones oscuros. El chico a su lado usaba una camiseta gris. La expresión de el era de fastidio, estaba algo molesto se le podía notar. Y la suya en cambio, era de felicidad, parecía estar alegre, su lengua estaba afuera como en señal de burla y estaba guiñando un ojo. 

Dio la vuelta a la foto, y encontró lo que parecía ser una descripción: " A pesar de que estabas cansado del trabajo, gracias por acompañarme. Feliz cumpleaños, Perra."

Se preguntó mientras sonreía tiernamente,  sobre quien era ese chico.

¿Era mi mejor amigo? ¿Mi hermano?......¿Mi novio?

Me gustaría recordarte.

Y una tremenda necesidad por recordar lo comenzó a invadir. Decidió volver ver la foto, y detallandola un poco, atrás de ellos, al lado de la recepción, estaba un sujeto. Vestía completamente de negro, era complicado tratar de verle el rostro, y sintió más curiosidad.

Como él no podía reconocerlo, sabía que con un rostro su hermana tal vez pudiese hacerlo.

-Hermano, aquí tienes tu vaso con agua.-Se quedó mirándole.-¿Darkar? ¿Qué tienes en tu mano?

-Andrea, hermana...-Se levantó, un poco dudoso en preguntar. Pero finalmente luego de unos tres minutos, le señalo la primera foto, donde yacía el albino solo.-¿Quién es este chico?

Vio las cuentas de su hermana agrandarse de pronto.

-Este chico....Es el mismo que yo siempre veo en mis sueños.-Vio de nuevo la foto para asegurarse de que decía la verdad.-Si, es él. Andrea, ¿Lo cono...?

-Ya te dije antes que no lo conozco, Darkar.-Respondió ella con un tono de voz intimidante.-Y que tú tampoco.-Le quito la foto de las manos.- termina ya de empacar, nos vamos de una puta vez.

¿Por qué actuaras así, hermana?-Se preguntó a sí mismo.

Ya no tenía la foto donde podía contemplar a flor de piel la felicidad del albino, pero tenía la foto donde confirmaba que si eran conocidos.

Que era aún mejor.

Obedeció a su hermana, tomo las ultimas cajas, y se fue del departamento.

Mientras bajaba las escaleras, se encontró con un pequeño niño que lo miraba triste. Sintiendo un poco de curiosidad, le regalo su almuerzo que había llevado por si le daba hambre. Se subió a la camioneta y escucho al niño agradecerle.

-Gracias, Darkar. Espero verte otra vez algún día.

Con una sonrisa, se fue del lugar.

"No sé quién seas...-Se decía.-No puedo recordarte....Pero algo tengo seguro y confirmado, eras especial para mí."

"Pero si eras tan especial y cercano, ¿Por qué no estás aquí conmigo?"

"Voy a responderme esas preguntas, algún día.-Se comenzó a reír.- Y la respuesta será, que te recordare."

-Darkar, discúlpame por haber actuado de esa manera. Te lo compensare, iré a trotar contigo de aquí en adelante. Pero debe....-Andrea le hablaba pero decidió ignorarla.

"Te lo prometo, a ti y a mí mismo"

¡FELIZ NAVIDAD! 

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