seis

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// monday //

Los libros no eran tan interesantes cuando él estaba cerca.

Verlo era suficiente.

En la librería, era raro no tener a ninguna pareja dentro, en un día. Siempre, siempre habría una.

Supongo que es así como el silencio trabaja bien en las relaciones, todos lo necesitamos de vez en cuando.

Había una pareja, quienes se veían de unos dieciséis o diecisiete, quienes probablemente se quedaban durante una hora en la librería, escondiendo sus cabezas detrás de un libro para besarse, de vez en cuando. Nunca compraban nada, más tarde, sólo enviándome una pequeña sonrisa avergonzada antes de irse.

No era el mejor espectáculo digno de ver, pero es probablemente la altura de su relación, en donde se gustan mucho, que no pueden separar sus manos de las del otro.

Había otra pareja, ambas mujeres, unos años mayores, supongo, que pasaban su tiempo hablando de libros que viesen que estaba sobre cualquier estante por el que pasaban. Era refrescante verlas, sobre todo cuando comenzaban a recitar lineas de un libro la una a la otra.

Una mujer de mediana edad, exactamente a las diez en punto los Miércoles, y cinco minutos después, un hombre de mediana edad venía, con una rosa roja como disculpa. Estaba convencida de que él lo hacía a propósito, pero sólo lo he presenciado dos veces, pero no puedo estar muy segura.

Un poco después de mi descanso, una pareja vieja entraba a la tienda, dirigiéndose a la estantería de los libros clásicos. Recordaban el pasado en como ellos han leído juntos antes, y bueno, la juventud de su relación estaba ahí.

A pesar de que no era una gran fan del romance, en general, admiraba como la tienda lograba atraer a la gente de esta manera.

Pero mientras veía al chico sentado al cruzar la calle, tomando una taza de café, me preguntaba si era posible ser atraída por alguien fuera de la librería.

quartz street ➢ brad simpson [au; español]Kde žijí příběhy. Začni objevovat