quartz street ➢ brad simpson [au; español]

diez

// monday //

Eran las tres en punto.

Eran las tres en punto, y mi mente no estaba centrada en lo que estaba haciendo.

Eran las tres en punto, y todavía no salía a ver al chico cruzando la calle.

¿Me estaría viendo? No, probablemente no.

Han sido dos semanas reuniendo mis ojos con él, y me preguntaba si se había dado cuenta de mi ausencia durante nuestro descanso.

¿Estaba bien el esperar algo tan imposible?

Inicialmente, se suponía que debía estar afuera, a la misma hora, en el mismo lugar, para verlo una vez más, pero la señora Johnson me había encargado ayudar a una mujer mayor a buscar un libro.

Cuando lo encontramos, me sentí aliviada, porque finalmente podría verlo.

"Todas las cosas están listas, si nuestra mente lo está," la anciana había citado Henry V, el libro que había estado buscando, antes de partir caminos conmigo.

Desempolvé mi vestido, mientras me levantaba del taburete en el que había estado sentada. Esas palabras me hicieron que pensar que tal vez, sólo tal vez, hoy tuviese el coraje para ir a hablarle al chico de la cafetería.

Era la primera vez que he tenido un sentido de audacia dentro de mí.

Ya no estaba angustiada cuando pasé a mi patrona y a la mujer mayor para tomar mi descanso.

Pero el momento en que abrí la puerta de la librería, sólo para encontrar a ese mismo chico en el que he estado pensando por dos semanas frente a mí, todos los nervios volvieron.

Estaba desconcertada y sorprendida por encontrarlo ahí, sobretodo porque desde el rabillo de mi ojo, vi un libro en la mesa al lado de mi silla, junto a algo que se veía como un paquete de azúcar encima.

Pensé que, tal vez, mi mente me estaba jugando trucos, que este era sólo un sueño.

Pero estaba despierta.

Eran las tres con diez.

Eran las tres con diez, y toda la audacia que pensé que tenía estaba drenada en cuestión de segundos.

Eran las tres con diez cuando miré a sus ojos marrones, labios temblorosos.

"H-Hola, soy Monday. "