Chat Noir (Chat Blanc p.2)

Capítulo 12

El lugar estaba en llamas, aquí ya no había nada solo quedaban escombros y cenizas.
La policía se escuchaba a lo lejos al igual que las ambulancias.
Marinette estaba desesperada buscando a su alrededor, ya habíamos visitado una de las fábricas no había nada, al igual que aquí.

Creo que solo nos teníamos que enfrentar a la verdad.
Nuestros compañeros se habían ido, la explosión había sido tan grande que ya no quedaba ni cenizas.

Mi querida Chloe, no podía ser que te pasará esto.
No debí darte ese Miraculous.
Ella ya estaba feliz, su madre convivía más con ella y además tenía esa relación extraña con Nathaniel.
Ella no podía irse, ella no.

-¡Chat!- me grito Marinette a lo lejos, yo me apresure sin pensarlo y al llegar sentí como mi corazón se alegraba un poco.
Nino estaba cubierto por ese caparazón verde, al parecer había alcanzado a cubrirse antes de que todo esto pasará.

-Esta inconsciente- le dije cuando su caparazón desapareció, él empezó a abrir los ojos lentamente.

-Chicos, aquí están- dijo en susurros, si que estaba débil.

-Tranquilo Nino, viene la ayuda hacia acá.

-¿Qué pasó?- preguntó él con dolor- ¿Dónde está Alya?

Esa pregunta nos dolió bastante y a Marinette no me quiero imaginar. Su amiga ya no estaba ni siquiera habíamos encontrado su Miraculous.

-Nino debes descansar- lo interrumpí de inmediato y le retire el Miraculous así podrían ayudarlo más rápido.
Otra explosión se escuchó a lo lejos y nos sorprendió a ambos.
Los camilleros venían hacia nosotros para ayudar a Nino y nosotros nos pusimos de pie de inmediato.

-Debemos averiguar qué pasó- me dijo ella decidida y después miró al camillero- Deben cuidarlo , está bien.

Salimos en búsqueda de aquel ruido y no fue difícil encontrarlo, el humo apareció en el cielo.
✦✧✧ ..... ✧✧✦

Todo el trayecto deseábamos equivocarnos pero no fue así. El humo nos llevaba a esa pequeña casa tan dolorosamente familiar.

El hogar del maestro Fu estaba el llamas, o bueno al menos lo que quedaba.
Todo había desaparecido, al pasar por todo el derrumbe podíamos encontrar cosas en llamas debajo de los escombros.
De verdad era una perspectiva desoladora.

-¡Maestro Fu!- nos apresuramos hacia él, estaba recostado en el piso mientras todo a su alrededor estaba hecho un desastre una persona estaba a su lado sosteniéndolo de la mano.
Tenía puesto un vestido amarillo y su cabello estaba sostenido por un pequeño moño, al acercarme más la pude reconocer.
La había visto antes en una vieja fotografía del maestro Fu, sus ojos llorosos nos miraron atentamente al acercarnos.

-De verdad esperaba poder verlos antes que... -Él hablaba muy lento y débil, podía notar que cada palabra le causaba dolor.
Al bajar la mirada pude notar que tenía una gran herida en el estómago.

-¡Hey! ¡Estará bien, maestro Fu! ¡Estará bien!- lo interrumpió ella de inmediato.

-Ella la tiene - le contesto el de regreso.

-¿Tiene qué ? - le pregunté atento.

-Lila se llevó los Miraculous- en su mirada podía ver miedo, sabía que esto no era bueno-ya me había descubierto antes pero espero el momento indicado para robarlos, destruyó todo el lugar con esos explosivos.

-Lo recuperaremos- coloque mi mano en su hombro, él estaba demasiado frío.

-Tendrán que hacerlo ustedes- hizo una pequeña mueca de dolor- ustedes podrán recuperarla, mi tiempo se acabó.