Epílogo

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— Despierta Shima que papá ya llego... — susurro el niño en el oído de su gemelo.

— ¿Papá...? ¡Papá!

Ambos gemelos salieron corriendo hasta la entrada de la casa donde no había nada. El pequeño Shima le recrimino a el gemelo Aki sobre la presencia de su padre en la propiedad.

— Pero vi su auto por la ventana... Mamá podrá decirnos, esta en la cocina.

Los niños pelinegros caminaron hasta la cocina de puntillas y asomaron la cabeza.

— Iugh... que asco.

Sus padres se estaban dando una explicita demostración de amor, nah patrañas era un beso.

— Terminaremos en la habitación... — susurro Daoming sobre el cabello de Seina. Se separo de la chica y se agacho para abrazar a los dos gemelos frente a él — ¿Qué hicieron hoy?

— ¡Visitamos a los abuelos!

— ¡Si! ¡Nos regalaron drones!

— ¿Enserio? ¿Me muestran?

— ¡Vamos!

Los niños jalaron a el hombre hasta la habitación de juegos donde se quedaron horas de horas. Seina les había llevado algunos pasteles y justo ahora esperaba a Daoming Si en la habitación. Él entro dando un suspiro y con las mangas de la camisa arremangadas.

— Logre dormirlos...

— Bien hecho — festejo Seina mirando la televisión.

Si frunció el ceño e hizo un puchero que no fue visto por la mujer. Se aproximo hasta la cama, llego gateando y se posiciono sobre ella mientras le robaba un beso. A Seina le cayeron unas cuantas gotas de agua, era el pelo de Si que estaba algo húmedo, al igual que la camisa y los pantalones.

— ¿Jugaron carnaval sin mi? Eres muy malo Shishin~

— Estaban muy emocionados  ¿qué les das de comer?

Seina rió levemente mientras miraba los labios de Si hechos una sonrisa.

— Ellos te aman — Beso — Nuestra vida a cambiado en estos 8 años...

— Ya no somos los mismos mi amor.

— Si... tengo que ir a ver a Ren.

— Cierto, pronto cumple otro año. ¿Seguimos con lo de la cocina? — pregunta coqueto.

— Uhm... convénceme.

Su vida es muy buena. Una linda casa, en un barrio bonito y son una familia bonita. Dos niños, ambos padres y un gato que por las noches visita a los gemelos. Las empresas se fusionaron y actualmente son parte de la lista de lideres mundiales en la economía global. Aunque la familia Daoming Zen tenga mucho peso sobre sus hombros nunca dejan de verse o amarse.

Los abuelos, Komei y Feng se casaron unos pocos meses después de nuestra pareja protagonista, fue algo muy intimo y privado, en una playita de un lindo pueblo de la prefectura de Okinawa. 

Sus amigos tenían esposas y uno de ellos ya tenia una linda niña que era la disputa de los gemelos a la hora de jugar pues ambos reclamaban su atención. Se acerca un romance y los padres lo saben...

Si, la vida es buena.

[T H A N K S]



No más Shancai | Jardín de MeteorosWhere stories live. Discover now