Capítulo 14

157 21 6
                                    

14


Esa respuesta me deja peor de lo que ya estaba, desesperado y con una incertidumbre incalculable trato de pensar en algo para responderle pero no puedo, ese mensaje me ha desarmado, ¿qué quiere decir con que se pondrá mejor?

A todas estas, no soy capaz de volver a escribir porque no sé si quiero leer su repuesta, me quedo inmóvil una vez más y me doy cuenta que tengo miedo, miedo de volver a estar vulnerable y volver estar a sus pies porque de ser así, esta vez no sé ni cómo reaccionaré a lo que viene, pero, ¿qué es lo que viene?

Mi mente se consume de una forma abrumadora queriendo y no queriendo saber que pasará más adelante pero creo que la incertidumbre me gana y no puedo, tengo que saber de qué se trata todo esto.

En busca de una repuesta, vuelvo a indagar dentro de la caja el supuesto obsequio dejado por mi desconocida para ver a que se refería con eso de las instrucciones, y en ese momento cae sobre mí un balde de agua helada al darme cuenta de que se trata, ahora entiendo todo, ahora entiendo a que se refería cuando dijo eso, pero ¿porque me dice que sabré cuando usarlo?

Sostengo en mis manos el objeto junto con las instrucciones, -entonces a esto se refería-, poner en mis manos el control de su placer enseñándome como se utiliza un vibrador manipulado a control remoto pero, ¿qué le hace pensar que voy acceder a esta propuesta indecente?

Pensar en eso deja en mi un profundo hueco de duda, porque, aunque ahora ya sé de qué va todo esto, mi cordura me ataca y me dice que deje las cosas así, pero la locura que ya hay en mi quiere darle riendas sueltas a este juego peligroso, -¿Por qué me reta?- pienso mientras me encuentro en una torturante disyuntiva que no me deja ni respirar.

Este reto se ha convertido en mi desarme dejándome totalmente en una difícil encrucijada y algo en mi interior me dice que lo malo no ha pasado todavía y que el momento de la verdad se acerca, pero lo peor de todo es, que no sé qué decisión tomar ante este ultimátum.

****

Tres días, tres días han pasado desde que recibí ese obsequio y es el mismo tiempo que llevo sin saber de mi desconocida, pero ¿por qué estoy tan agobiado si justamente es eso lo que quería, Por qué no dejo de pensar en ella y en todas las cosas que tengo en esa caja?

Estos tres días en vez de mejorar mi inquietud ha empeorado, porque no saber nada de ella me tiene mal, muy mal, no he podido dejar de pensar en todo esto, y que decir de mi obsequio, esa caja llena de objetos sexuales, quien diría que esta desconocida me iba poner de esta manera, en este momento no sé qué pensar de mí mismo, ahora mismo me desconozco pero no puedo dejar de pensar en ella.

Mi paranoia ha aumentado de una forma tan grande que a cada momento miro el chat para ver si está en línea porque a todas estas no he me atrevido a escribirle, no quiero que se de cuenta que estoy desesperado, ¿Desesperado? ¿Cómo he podido llegar a esta situación?.

Mi conciencia me reprocha por estar de esta manera, no entiendo como he podido llegar a este punto en el que estoy más pendiente de ella mí y de que es lo que esta vez está tramando que a mí mismo, en definitiva, no puedo seguir en esto.

Llego a clases de mal humor como lo he hecho estos últimos días, esto de verdad que no me está sentado bien, he puesto a pagar a mis alumnos, cosa que no debería pasar, pero en este punto estoy perdiendo la conciencia, la suerte es que hoy es viernes y tendré todo un fin de semana para desinfectarme de todo y llegar el lunes totalmente nuevo.

Me dispongo sin más a dar mis clases para evitar pensar en todo y creo que por primera vez en tres días no estoy mirando mi móvil a cada 5 minutos esperando un mensaje de mi desconocida.

Un Buen ProfesorOnde histórias criam vida. Descubra agora