My Narcissist Pirate

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La pelinegra acomodó sus manos sobre su regazo mientras miraba por la ventana aun faltaba mucho para llegar, aun así no se relajo nada, estaba tan nerviosa, no había pisado el reino de auradon desde bastante tiempo, quería a ver su viejos amigos, quería ver que tanto habían cambiado desde su ausencia, pero lo que más quería era ver al cobrizo, el cual no le había escrito en meses, la última carta que recibió fue cuando el rey le contó sobre la llegada de Mal, Evie, Carlos y Jay a auradon, pero nada más, lonnie le había escrito dos veces pero el mes pasado, pensaba que quizás solo estaban muy ocupados con sus labores, pero la realidad era que ben le había dejado de escribir ya que prefirió sus obligaciones reales y después porque comenzó a salir con Mal, lonnie dejo de escribirle por estar al pendiente de lo que el cobrizo le pidió y la única que le seguía escribiendo era Bella, la reina siempre estaba al pendiente de ella pero cuando la pelinegra hablaba o preguntaba por ben la reina cambiaba el tema, Bella prefería evitar decirle sobre ben y la chica villana con la que ahora salía, la mujer pensaba que estaba haciendole un bien además de que no la quería lastimar en absoluto.

Sol le envió unos textos a su madre avisándole que estaba por llegar a auradon, habló un rato con su padre quien le estaba dando recomendaciones sobre cualquier cosa, le había dicho que fuera amable con los hijos de los villanos y que se pusiera al corriente con sus materias, al colgar miró al conductor quien le dijo que pronto estarían en la preparatoria que se tranquilizara, la chica sonrió al espejo retrovisor y miró sus zapatos de color morado, había encontrado esos en el fondo de su armario en el internado y le habían gustado mucho asi que no dudo en ponerselos por la mañana, se distrajo un poco en eso.

Cuando el Hada Madrina piso la entrada de la preparatoria vio a los periodistas amontonados uno detrás de otro, tenían las cámaras y micrófonos listos, el rumor de que la Princesa de Corona y prometida del rey Ben llegaría hoy se había esparcido como humo por todas partes en auradon, por lo que todos los medios querían obtener la primicia lo antes posible y es por eso que estaban ahi, la que más resaltaba era la mujer de cabello negro y corto vestida de azul, amarillo y rojo, estaba hablando con su camareografo, quería tener imagines claras y sonido perfecto, el hada le sonrió a la mujer, sabía perfectamente que Blanca Nieves era la más interesada en el asunto, no había tenido una buena noticia desde la coronación del Rey Ben, y Más o menos sobre la llegada de los vk's a auradon por lo que necesitaba esta noticia para salir a flote, sin embargo esta era la nota que todos querían tener y por eso le interesaba más.

En cuanto la limusina de color dorado estacionó frente a la preparatoria, todos los reporteros con sus cámaras respectivas se acercaron hasta dejar sin espacio el lugar, el hada madrina se hizo de espacio para poder caminar apartando a uno que otro, el chófer vestido de lila abrió la puerta pidiendo respetar el especio de la princesa que al ver afuera respiro hondo, su abuela le dijo que esto pasaría si las personas se enteraban de su llegada por eso habían mantenido todo en secreto, bueno al menos eso creían, trató de calmarse mientras tomaba su bolso de mano de color lila, todos querían tener fotos de ella, querían conseguir algo más que su llegada, trato de mirar entre la multitud aun dentro de la limusina pero solo vio al hada madrina, ben no estaba ahi, así que esto sería un escándalo lo cual sería excelente para todos ellos, bajo con cuidado de no caerse.

Bella y Adam llegaron al lugar pero no podían dar ningún paso hacia el frente, la princesa cerró la puerta con cuidado y trató de avanzar pero no se le permitió, los periodistas cruzaron la línea del espacio personal de la princesa, Blanca Nieves miro de arriba abajo juzgando la vestimenta de sol que consistía en un pantalón morado, zapatos del mismo color, blusa floreada, saco con mangas tres cuartos también morada, el cabello recogido en una trenza larga en su hombro, su collar de media luna con un corazón y estrellas, sol amaba su colgante, su padre se lo había obsequiado el dia en el que nació y jamás se lo quitaba, antes de cualquier cosa los periodistas comenzaron a amontonarse.