CUESTIÓN DE ESTRATEGIA.

90 12 28
                                    


CUESTIÓN DE ESTRATEGIA.


*

"No pienses que te espío,
no llego a ser tan ruin..."


Pasaba por aquí /Aute.


*


La entrevista con las distintas niñeras no habían rendido frutos y Hyun Joong se encontraba al borde de la desesperación, la cual fue en aumento cuando, al salir del trabajo, recibió una llamada de su madre, anunciándole que su tía se encontraba más grave y necesitaban partir a la voz de "ya" a cuidarla. - ¿Y cuando tienen que viajar? – Preguntó esperanzado de tener al menos otra semana para lograr encontrar a alguna nana apropiada, sin embargo, sus esperanzas se derrumbaron cuando su madre le dijo con voz apenada que tendrían que salir al día siguiente. - ¿QUÉ? - No podía haber cambio de planes, su tía necesitaba con urgencia ser atendida y su madre le pedía fuera menos exigente en lo concerniente al cuidado de los gemelos, cosa en la cual Hyun Joong no pensaba ceder. El bienestar de los gemelos era asunto primordial y no dejaría a sus hijos en manos de cualquier persona.


El problema estaba en que sus padres partían al día siguiente. Y él, por lo pronto, no podía pedir ningún permiso en el colegio pues estaban saturados de trabajo.


¿Qué hacer?


Decidió, antes de subir al auto, que haría las llamadas necesarias y encontraría una niñera adecuada para esa tarde, costase lo que costase.



******


Alumnos entraban y salían pero el objetivo al cual había ido a buscar hasta ese sitio no se veía por ninguna parte. Esa mañana, había prometido a Hyung Jun por fin hacer contacto con el prospecto que los ayudaría a nivelar su situación económica tan precaria, pero dicho prospecto no daba señales de vida. Francamente, Saeng comenzaba a aburrirse de estar ahí parado, simplemente esperando, con la chaqueta de aquél tipo en las manos. Decidido estaba a marcharse cuando a lo lejos lo vio. Bien, lo abordaría en cuanto fuera por su auto, con el pretexto de devolverle su prenda. En ese momento cayó en la cuenta de que no sabía en qué vehículo se movía y vamos, ni siquiera sabía su nombre. Suponiendo que tenía que conseguir información de la forma que fuera, Saeng detuvo a un chico por la chaqueta, diciendo. – Tienes que ayudarme.


- ¿Yo? ¿A qué? – Preguntó el chico quitando la mano de Saeng de un manotazo.


- Vaya niño tan irrespetuoso. – Murmuró entre dientes, el chico avanzó pero esta vez Saeng lo detuvo por el hombro. – Te pagaré por cierta información.


El chico lo miró dudoso. - ¿Qué es lo que quieres saber?


- Ese sujeto... el de la ropa anticuada, ¿quién es?


- ¿Te refieres a Hyun Joong-ah?


- Eeeh... sí, ¿qué sabes de él?


Las cuatro y diez.Onde histórias criam vida. Descubra agora