4. El Gobierno Estudiantil del Estado

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Capítulo 4

Me encuentro acostada en mi cama estirándome lentamente, mientras voy abriendo mis ojos. La luz proveniente de la ventana impacta sobre mi cara de manera que me doy la vuelta, dándole la espalda a la molesta claridad. El canto de los pajaritos cerca de mi ventana, son música para mis oídos y al escucharlos tan cerca apartó mis cobijas y me levanto con rapidez dirigiendo al ventanal deseosa de verlos. No obstante, lo único que logro ver es esa silueta extraña a lo lejos mirando con detenimiento hacia mi dirección.

¿Qué será lo que quiere de mí? Porque ya ha pasado mucho tiempo y aún continúa detrás mío.

Cierro la cortina algo temerosa y seguidamente me dirijo a la cocina. Saludo a mi madrina y después me siento en la mesa para desayunar.

Ya ha pasado un mes desde que fuimos a la Residencial Hamilton Crue y entregamos aquel pedido en donde todo se salió de control. Después de eso me acuerdo que llegamos a Food Lover's y la «fastidiosa» cuando nos vio llegar su expresión era de 'al fin llegaron' —con cara de querer matarnos— Y pues nos hecho una retahíla de regaños— Al final le explicamos todo lo qué pasó y ella pareció entender aunque no del todo.

Desde ese momento no he podido olvidar ese día, aún lo recuerdo perfectamente cómo si hubiese sido ayer, y más aún porque por desgracia perdí mi pulsera de amuleto. De seguro, se me cayó en la piscina y eso es algo que me duele bastante porque ese amuleto significa mucho para mí. Era un recuerdo relacionado con mi padre, lo cual aún es un misterio para mí.

Por mi cabeza cruzo la idea de ir a la mansión y buscarla, pero Ander al enterarse se negó rotundamente, pues según él ese lugar no es confiable.

Sus ideas no tienen ninguna conclusión lógica.

Varias veces traté de entrar al cuarto secreto que esta situado detrás de la cocina, en donde hay muchas cosas de mi papá. Siempre permanece cerrado con llave y por más que le insisto a Madrina para que lo abra, dice que las llaves se perdieron, cosa que no creo.

No me trago esa mentirota.

Por otro lado Tess cada que puede pasa recordándome a cada minuto del día lo guapo que está el chico de los ojos verdes que me salvó, al igual que el otro amigo de él. Al parecer ella quedo maravillada con ese chico.

Ander siempre que nos escucha hablar sobre ese tema se enoja, no soporta ni siquiera que mencionemos lo que sucedió. Ese día me dio la impresión de que no le agrado para nada el chico de los ojos verdes ni sus amigos, pero sigo sin entender el motivo.

¿Ander los conocerá?

Fue lo primero que pensé, sin embargo no lo creo, estoy segura de que él me lo hubiera dicho. Además ¿De donde los iba a conocer si esos chicos no son de aquí?

Cuando le conté a mi hermano todo lo que pasó se preocupó un poco, más cuando se enteró de que casi me ahogó por culpa de una «Histérica peliteñida» Sin embargo, luego se tranquilizó al saber de que alguien por lo menos tuvo la gentileza de ayudarme.

¿De dónde será ese chico?

Juro que no puedo olvidarlo. Su mirada, esos hermosos ojos que tiene, la manera tan dulce de sus palabras cuando me pregunto «¿Estás mejor?» Ugh... fue algo tan lindo que removió algo en mi interior.

La duda sobre su tatuaje me dejó muy intrigada, ya que tengo la intuición de que él sabe el significado de  ese símbolo. Lo triste es que nunca más lo volveré a ver.

No pierdas las esperanzas.

Muchas cosas ocurrieron este mes y una de ellas es que Doña Florencia vino a mi casa a contarle Madrina lo que que pasó respecto a las flores que agarré de su casa y la muy víbora la amenazo diciéndole que eso no se iba a quedar así. Que iba hacer hasta lo imposible para que yo recibiera un buen castigo alegando de que yo era una mocosa repugnante sin una pisca de educación.

Sangre Heredera [#1] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora