No Me Importa (rubegetta) [editando]

Epílogo

Rubén caminaba una vez más en dirección a la colina, el frío del invierno le había provocado una ligera gripa o al menos eso es lo que  él hacía creer.

Al llegar a lo alto se sentó y y espero a que el sol se escondiera, respiraba ondo, queriendo llenar sus pulmones de aire fresco, acomodaba de ves en cuando su bufanda y su cabellera.

Cuando vio que el astro bajaba, suspiró y empezó a pensar en su vida hace menos de 5 meses, cuando vivía con vegetta en la cabaña, cuando se besáron bajo el muérdago, pensó en todo lo bonito que había pasado junto a él, porque así lo había prometido.

Metió una mano a su bolsillo y sacó el papel doblado a la perfección que le había dado Samuel. Lo extendió y empezó a leer.

Rubén:

No creo poder resistir más tiempo, mi salud empeora cada vez más y siento tanto no poder decirte esto a la cara.

Quiero que seas feliz, no te quedes estancado en esta etapa de tu vida aún te queda mucho por vivir, cariño por favor no estés triste, quiero que sonrías y vivas feliz el resto de tu existencia.

Te amo demasiado, creo que nuestro sentimiento es mutuo. No sabes lo triste que me pone no poder volver a verte hay veces en las que lloro sin control alguno en las noches y luego mi maldita enfermedad ataca más fuerte.

Rubén, mi osito espero poder ser un recuerdo lindo en tu vida, espero que seas feliz con alguien mas y tengas una vida magnífica.

Chiqui, te voy a extrañar como no tienes idea. Mi pequeño osito malvado, me duele dejarte solo, me duele que por mi culpa tus esperanzas en el amor se vean afectadas.

Te amo, te amo y te amo mucho.

Samuel.

Al terminar de leer la carta, sus ojos se inundaron de agua salada y luego esa mima sustancia recorrió sus mejillas hasta llegas al punto de desprenderse de su cuerpo y caer al suelo.

Tenía claro que su destino era el mismo y por eso le había dado a Auron, de una vez, todo el derecho a hacer lo que quisiera con las construcciones de ambos.

Miró como él cielo se pintaba de diferente tonalidades y sonrió feliz por cumplir su promesa.

Las aves lo acompañaron una vez más y cuando quizo reír al ver a un cerdito bebé muy cabezón, la tos lo atacó y rápidamente llevó una mano a su pecho y otra para cubrirse la boca.

Al revisar la manga de su abrigo blanco, comprobó lo que sospechaba, una gran mancha de sangre proveniente de su boca se encontraba en aquella prenda.

Sonrió triste y se levantó para irse a su casa. Al ir de regreso, tuvo que quedarse apoyado a un árbol porque el pecho comenzó a arderle, la garganta le dolía y su respiración se entrecortab. No había ido al médico, lo regañarian por incumplir una de las normas y es que, él bien sabía que ya no podía mantener ningún tipo de contacto con la boca de samuel por el contagio de la propia muerte y aún así, aquel día lo beso. Empezó a sentirse débil, y  se dejo caer al suelo, ya no podía respirar, hacía lo posible para que a sus órganos entrará el aire pero no lo logro.

Como pudo se levantó, y camino a la gran isla que con suerte le quedaba cerca, ignoró como siempre el elevador y subió por las escaleras de los costados, cuando estaba a punto de llegar a la plataforma, cayó.

Su cuerpo descendió de manera brusca al patio de abajo, el dolor abundó en todo su ser y dio un grito de dolor al no poder hacer nada, decidió que era lo mejor pues él mismo había retado a la muerte.

Cerró los ojos y quedó tirado ahí...

Al abrirlos se encontró con el sol.

👑👑👑👑👑👑👑

Ahora si, esta historia llegó a su fin. UvU

Estoy mi agradecida con todos ustedes por haberme dado la oportunidad de relatarles una historia de amor, que si bien es un poco cliché (al menos eso pienso yo) al final estoy muy contenta de poder hacer ee tipo de proyectos.

Dejen sus opiniones aquí (ignorada) las leeré con mucho gusto.

Me gustaría que se pasarán por mi perfil para que también le dieran una oportunidad a mi otra historia.

Los quiero. Un beso. 🐥

👑👑👑🐻👑🦄👑👑👑