Perdida (Hwang Hyunjin) [Terminada]

26

Otro día mas de clases, últimamente se me hacia aburrido, creo que me acostumbre a no darlas, me costaba estudiar y concentrarme mas de una hora. Las materias iban tan rápidas que no podía seguirlas, debía de acortar a tres horas mis horas de sueño.

Llegué al instituto y fui junto al bibliotecario para leer algún cómic. El bibliotecario me saludo como si nunca hubiera pasado nada, no es que esperara un fiesta pero al menos un saludo distinto.

Tomé un webtoon impreso y me senté en mi cómodo sofá.

Abrí los ojos y resultó ser que me dormí cuatro horas sentada ahi, md levanté fregando mis ojos.

Caminé y me encontré con el bibliotecario, tenía unos lentes de lectura, se los quito y me miró con una expresión rara.

- No sabía que estabas aquí, crei que ya te habías ido- dijo sonriendo con sus perfectos dientes.

- Creo que la próxima deberás de salir de tu escritorio y caminar un poco ya sabes... Por si algún estudiante se haya quedado dormido - dije mirándolo con reproche.

- Agradeceme que no te quedaste dormida en la clase de...- miró el horario que tenía bajo la vitrina- wow... Deberías de agradecerme por dejarte dormír aquí y no en la clase de física que tenías con la profesora María, esa vieja es casi un fósil, debería de considerar poner a ella aquí en la biblioteca junto a los libros del tiempo precambrico- reí por sus ocurrencias.

- Yo te ayudaría pero ahora debo de ir a la siguiente clase y creo que la última- dije arreglando un poco mi cabello.

- Me parece bien, ven cuando quieras- dijo despidiéndose de mi y yo sólo le hice un ademán sin siquiera mirarlo.

Caminé hasta estar cerca de mí salón de clases, me apoye en una de las barandas, no era muy alto, quizás un metro ya que aún podía tocar las plantas. Empecé a jugar con algunas dalias e hibiscos del jardín, me encantaban sus colores.

- Creo que alguien no durmió muy bien- escuche una voz detrás de mi y al darme vuelta vi a quien supuse que era Jeongin, lo vi en la casa con Hyunjin.

- Emmm si... Eres Jeongin ¿no? - el asintió con una sonrisa.

Wow sus hoyuelos son muy tiernos y quiero apachurrarlo cada vez que lo veo sonreír.

- ¿Cómo sabias que estaba durmiendo? - pregunté y él sonrió mucho más.

- Quizás porque tú cabello está algo alborotado y también porque me quedé dormido en la biblioteca y te vi- reímos.

Que vergüenza, seguro me vio con la boca abierta.

Me empecé a arreglar el cabello pero no podía verme, así que Jeongin se acercó a arreglarme un poco. Justo en ese instante sonó el timbre y una manada de alumnos salió, empujando a Jeongin contra mi cuerpo, estábamos demasiado cerca, nos mirábamos pero era realmente era incómodo.

- Lo siento, en serio lo siento- decía Jeongin intentando separarse de mi y yo sólo reía.

Se notaba a leguas su inocencia, quizás era menor.

- ¿Jeongin? - escuchamos una voz.

Hyunjin.

- ¿Qué se supone que hacen?- se paró a un lado nuestro mientras nosotros seguíamos intentando no pegarnos.

- Sé que se ve mal pero no es lo que parece, ni siquiera la conozco- dijo Jeongin y su rostro aumentaba de color.

- Soy Eva- le dije a Jeongin y se sorprendió pues abrió lo más que pudo sus ojos.

- ¡Que mier...! - me empujó hacia atrás para separarse de mi y caí de espaldas entre las plantas.

- ¡Eres muy bruto!- escuché como Hyunjin le reprochaba a Jeongin mientras yo intentaba recuperarme del golpe.

- Como lo siento, perdón, es que Hyunjin y Minho, ayyyyy ya sabes- escuché a Jeongin hablar muy rápido pero un zumbido me molestaba en la cabeza.

-¿Eva estas bien? - escuche a Hyunjin sintiendo como me garra a del brazo para levantarme.

- Hyunjin, me duele la espalda y escucho un ruido agudo en la cabeza ¿lo escuchas? - Hyunjin me miró extrañado y luego miró a Jeongin y luego cerré los ojos.

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Abrí los ojos y me encontraba en la enfermería, me senté algo lento para no golpearme, ya que recordé el golpe que me provocó Jeongin.

- Oh Evangelie, ya te has despertado- dijo la enfermera al entrar a mi lugar, ya que solo eran camillas divididas por cosrtinas- te he inyectado anestesia para que puedas volver a tu casa caminando, no toques el aérea que golpeas te pues la anestesia es solo para el musculo y no para el hueso- asenti- no puedo hacerte radiografías pero si te duele demasiado en unas horas, te recomiendo que vayas al hospital, según mi diagnostico solo fue un golpe ya que no caíste de muy alto y además caíste sobre pasto y plantas.

- ¿Puedo irme ya? - pregunté al pararme.

- Si, ah por cierto, uno de los chicos de intercambio se quedó a esperarte afuera y te deseo lo mejor con el director, caíste sobre sus preciadas flores, si yo fuera tú, me esconderla de él siempre- sonrió, parecía ameble y muy joven,quizás unos 26 años.

Salí con mi mochila que quien sabe quién me trajo.

Me quedé congelada al ver a Hyunjin sentado con las manos cubriendo su rostro.

- Hyunjin- le susurre y se levantó, parecía cansado.

- No preguntes qué hago aquí, porque ni yo sé que hago ayudando a una extraña- dijo poniendo su bolso en un hombro- me alegro de ver que Jeongin no te lastimó.

- Yo te recuerdo- susurre bajando el rostro, conteniendo las ganas de llorar.

- ¿Qué? - dijo volteandose a verme.

-¡Que yo te recuerdo! ¡Recuerdo todo lo que pasamos, recuerdo cada momento cada segundo, desde el momento en que me viste como fantasma hasta el momento en que nos dormimos juntos! ¡Recuerdo eso y mucho más!¡Lo recuerdo todo por dios, deja de tratarme como una extraña! ¡¿Qué acaso no ves que me lastimas?! - dije mirándolo dejando caer todas mis lágrimas.

Cerré de nuevo mis ojos para detener mis lágrimas, no quería que me vea.

Segundos después solo sentí como me abrazó, me abrazó fuerte como si tuviera miedo, como si tuviera miedo a que todo esto sea un sueño o que le esté mintiendo.

- Te extrañé, te extrañé y quiero que sepas que también a mi me dolía ignorarte, me dolía tanto que lloraba todas las veces que me alejaba de ti, me dolía verte reír con otras personas, me dolía verte con Chan, con Jisung abrazados, me dolió saber que besaste a Minho, me dolió verte con Jeongin tan cerca, porque yo debía de ser, yo fui quien te apoyo en todo este tiempo, yo... - lo besé.

Lo besé sin compasión, lo besé como si nunca nos hubieramos besado, como si lo necesitará. Si alguna vez dije que no sentí nada por él, me retracto, ahora sentía cosas mucho más avanzadas que sólo mariposas, quizás era toda una jungla en mi estómago.

Me apretó a su cuerpo como si intentará fundirme en él pero todo esto desapareció en un segundo.

- Señor Hyunjin y señorita Evangelie, los veo en tres minutos en mi oficina.

¡Maldita sea! Olvidé que estábamos en el instituto a la vista de todos, a la vista de los directivos.