•Capitulo 29•

143 13 4
                                    

Bardock, Gokú, Raditz y el Cyborg descendieron hacia la casa del peliflama.

--- ¡Vegeta! --- gritó Raditz al caer encima de su amigo.
--- ¡Oh, maldición Raditz! ¡Quítate de encima, pesas demasiado! --- se quejó.
--- Yo también te extrañé Vegeta --- dijo Gokú encima de Raditz.
--- ¡Bardock! ¡Haz algo con tus mocosos!

--- ¿Y como han estado pequeña? ¿Vegeta se portó bien? --- dijo el de la cicatriz tomando el mentón de la peliazul.
--- Claro, él siempre se porta bien --- respondió ella feliz.

Con mucha desesperación el peliflama levantó a los dos saiyajines que residían  tranquilamente encima de él y los mandó a volar por los aires de un impulso. Sin perder tiempo tomó del cuello de la camisa a Bardock y lo alejó de la pequeña.

--- Tengo que hablar con ustedes urgentemente --- dijo molesto el peliflama.
--- ¿Ah sí? ¿y que es eso tan importante? --- dijo el mayor quitándose del agarre del menor.
--- Volvieron.
--- ¿Volvieron? ¿quiénes?
--- Los cazadores.

El mayor con la cicatriz se quedó sin habla, una expresión seria se pintó en su rostro. Todos entraron en la casa del peliflama y mientras que la pequeña peliazul preparaba la mesa para que ellos comieran, mientras los saiyajines deliberaban en la biblioteca para guardar la discreción.

--- ¿Dónde los viste? ¿Hablaste con él? --- preguntó Bardock.
--- Estaba en la entrada del bosque, al parecer ya sabe que vivimos por esta zona y sabe nuestro secreto.
--- Maldición, esas ratas son rápidas.
--- ¿Qué tanto odio nos tienen? --- cuestionó frustrado Gokú.
--- No soportan que existan unos seres tan perfectos como nosotros, simplemente es envidia --- comentó Raditz mientras jugueteaba con el cabello del Cyborg.
--- Además que nos miran como una amenaza para su estúpida sociedad --- recalcó el peliflama --- Pero por el momento solo sé que hay uno, un estúpido de cabello rosado.
--- ¿Umh? ¿cabello rosado? --- cuestionó Gokú --- ¿de casualidad es amigo de Bulma?
--- Sí, ¿cómo lo sabes?
--- Bueno, a veces lo miraba seguirnos cuando caminábamos con ella, o los veía hablando en lugares poco habitados --- comentó aquel pelipalmera.
--- ¿Qué? ¿y por que demonios no me avisaste? --- gritó furioso el peliflama.
--- Supuse que era un admirador de Bulma o algo por el estilo --- siguió diciendo totalmente calmado.
--- Eres un estup.... ---
--- No es momento para pelear Vegeta --- interrumpió Bardock --- ahora es tiempo de estar alerta, hay que salir lo menos posible de aquí, por ahora es mejor si vivimos reunidos en un solo lugar.
--- ¿Esta bien si es en tu casa? Es la que más lejos queda de aquí --- sugirió Vegeta.
--- Si es lo mejor... Vé a dejar a tu peliazul en su casa y nos vemos en la mía.
--- ¿Eh? --- el peliflama hizo una pausa --- ¿Es necesario que ella se alejé de aquí?
--- Un cazador no lastima a humanos corrientes --- dijo con cierto toque burlón.
--- Pero él sabe que ella está con nostros y podría no sé...
--- Por favor Vegeta di de una buena vez que no quieres que la bella peliazul se alejé de ti, que quieres que ella se quedé contigo --- rió Raditz.
--- ¿Que hablas tú? ¡Desaparece a ese cyborg! Tampoco es necesario que lo lleves --- respondió de mala gana.
--- ¡Todavía lo estoy reparando! Es totalmente necesario que lo llevé conmigo --- defendió sonrojado el pelilargo.
--- Ya dejen de pelear niños --- regaño Bardock tratando de no perder la paciencia --- La peliazul y el cyborg pueden venir también, pero tienen que tener claro que una vez que entren no pueden salir.
--- Por mí no hay problema, no es cómo que tenga otro lugar al cuál ir --- comentó el pequeño cyborg.
--- Esta bien, ahora tu habla con la humana mientras que nosotros nos encargamos de lo demás.
--- Como sea --- dijo Vegeta.

Los muchachos salieron de la biblioteca y se dirigieron hacia el comedor dónde Bulma les tenía preparado un festín de carne, los chicos sin perder tiempo devoraban sin cuidado excepto el peliflama quién se reunió con la peliazul en la habitación que era de ambos.

--- ¿De que querías hablar Vegeta? --- preguntó dulcemente
--- Bulma... Seré directo. Quiero que vengas conmigo y no te separes de mí --- dijo el viéndola a los ojos.
--- ¿V-Vegeta?! --- respondió ella totalmente asombrada --- ¿Que me vaya contigo? ¿A dónde irás?
--- Es algo complicado de explicar, por ahora viviremos en la casa de Bardock, solo necesito tu respuesta ¿vendrás conmigo o no?
--- Claro, no dudaré en acompañarte --- dijo ella abrazandolo.
--- Bien, ahora empaca tus cosas que nos tenemos que ir ya --- ordenó él alejándose.
--- Esta bien pero, aquí solo tengo unas cosas para pasar unos días, el resto de mis cosas aún estan en el apartamento.
--- Maldición, bueno te llevaré rápido. Pero primero larguémonos de aquí.
--- Esta bien Vegeta.

Los dos salieron de la habitación y se reunieron con los demás, quiénes terminaban de devorar la carne que Bulma les compró.

--- Bulma, gracias por la comida --- dijo alegremente Gokú.
--- No es nada --- dijo dulcemente.
--- ¿Ya están listos? Debemos marcharnos --- comentó Bardock.
--- Sí, sólo llevaré a Bulma por unas cosas a su antiguo departamento --- respondió el peliflama.
--- Esta bien pero apresúrate, nosotros nos encargaremos de tu casa.
--- Bien, vamos Bulma.

El peliflama tomó el brazo de ella mientras que la peliazul se fijaba en que los chicos derramaban un líquido por el suelo, no le prestó mucha atención y subió a la espalda de Vegeta quién se lo había ordenado.

El peliflama prendió vuelo hacia las nubes, ya estando arriba la peliazul volteó a ver la mansión de Vegeta, pudo ver como uno de los chicos tenía sus maletas y unas cosas del peliflama. También vio como Raditz encendía un fósforo y lo dejaba caer en la entrada.

En pocos minutos toda la mansión de Vegeta comenzó a arder en llamas.

--- ¡Vegeta! ¡tu casa! --- grito asustada.
--- Tranquila, no grites --- dijo calmado --- ya ibamos a volver ahí.
--- Pero...
--- Confía en mí --- dijo tratando de calmarla.

La peliazul no dijo nada más y abrazo aún más al saiyajin, no tardaron mucho en llegar al apartamento y empacar todas las cosas necesarias para la peliazul, y nuevamente subieron al cielo para dirigirse a casa de Bardock.

Tardaron poco minutos en llegar, estando abajo Bardock les indicó donde se quedarían pues tendrían que compartir habitación.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 16, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

[PAUSADA] Enamorada De Un Mounstro ❤ V&BDonde viven las historias. Descúbrelo ahora