Trece preguntas.

Pregunta seis.

Me encontraba de regreso en el bar. Esta noche Derek no estaba, así que no habría nadie insistiendo en que me fuera temprano y que esto no era bueno para mi salud. ¿De qué se preocupaban? Llevaba mucho tiempo sin estar bien, ya esto era parte de la rutina.

Saqué la libreta de mi bolsillo y volví a escribir, esta vez hice un esfuerzo por no repasar las anteriores cinco preguntas plasmadas en el blanco papel.

6. ¿Que esperabas realmente de regalo en nuestro primer aniversario?

Recordaba bien tu cara de decepción, no puedes negarlo, fue demasiado evidente que no era lo que querías en realidad.

Aquella vez había comprado un hermoso collar de perlas, mamá me había ayudado a elegirlo. Había costado una fortuna pero ella lo valía.

Sabía que le gustaban las cosas de marca, cosas caras. A veces me preguntaba en qué momento me había conseguido una chica así, pero estaba perdidamente enamorado de ella.

Su cara no fue de emoción, mucho menos de sorpresa. Simplemente lo observó por algunos segundos y lo tomó con la decepción brillando en sus ojos, para después llevarlo a su cuello.

No era el regalo que esperabas, tal vez para ti era algo demasiado barato, algo sin interés, pero para mí costó una fortuna.