Capítulo Seis

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— Megan... — Escuché la voz de Josie, pero me sentía flotando en una cama de agua, que no me dejaba abrir los ojos fácilmente. — Megan...

La sacudida que me dio en el hombro fue suficiente para despertarme de un tirón, mucho más pues fue el hombro lastimado. Mis ojos estaban rojos, mis manos resecas, y sentía que me habían drenado todo el líquido del cuerpo. Me levanté del suelo de la van, bajo la mirada expectante de la chica.

— ¿Dónde están los demás, Josie?

— Están hablando con Ruby. Parece que vamos a seguir el camino a pie. — La niña me acercó una botella con agua, y le agradecí, acariciandole el cabello. — Megan... ¿Te sientes bien? Te ves... te vez algo demacrada.

— Debo de tener la nariz rota del golpe que me dio aquella mujer, eso es todo. Hablando de ella, ¿qué sucedió?

— Ella le dio una paliza a Liam, pero Ruby le ordenó que fuera al bosque, y la mujer desapareció.

— ¿Y ella simplemente se fue?

— Si. Desapareció, como si nada.

Tenía que ser una broma. Siempre había notado algo en Ruby, algo que andaba mal. No entendía porque pero ella no parecía ser una verde desde el principio. Lo torpe que era en el campamento fue suficiente para saberlo. Josie bajó de la mini van, seguramente para decirle a los muchachos que yo ya había despertado.

Observe por la ventana. La cortina que había afuera evitaba ver, pero el reflejo era señalado por el fondo oscuro. Aunque no podía ver el color de mi rostro, pero si las marcas oscuras que tenía. Me acerqué más al vidrio, tratando de ver mis ojos.

Estaban rojos, tanto que parecía tener sangre regada. Masajeé mis ojos con agua y los volví a abrir. Ayer, en la pelea, sucedió algo realmente extraño. Nunca había sentido esa clase de fuego llenarme toda, y ese extraño líquido cayéndome de las manos. Sentía que, si me esforzaba, podía terminar desintegrando todo a mi alrededor.

Respire profundo y salí de la mini van por el otro lado, para echarme lo que quedaba del agua en el rostro. Necesito calmar la rojez de mis ojos, o ellos lo notarán. Se que Josie no diría nada sin que yo la dejara, pero no puedo hablar de esto hasta llegar a un lugar seguro.

Volvi con ellos, después de ver que la rojez de mis ojos bajó, y ahora parecía recién levantada. Estaban en un silencio algo tenso, pero cuando llegue, Charles me preguntó como me sentía.

Primera vez que no me está reclamando nada.

Bien, solo siento que me han pateado el rostro varías veces — Sonreí, a pesar de la hinchazón que tenía. Liam me dijo lo que había sucedido, y que con en el mapa que cargaba Charles habían logrado señalar la ruta para llegar al campamento.

No me hablaron nada de lo que sucedió con Ruby, y ella solo me miraba de reojo, escuchando a Liam. No tenía que decirme, claro. Pero en el campamento me daría cuenta.

Cuando comenzamos a caminar por la ruta que Charles marco, noté que Liam y Ruby iban tomados de la mano. Sonreí ligeramente, algo decepcionada. Al menos hizo que mi corazón trastabillara por un rato.

¿No te duele mucho la nariz? — Cuando alcance a Charles en la caminata, las niñas junto a los otros dos, me preguntó. Negué ligeramente, acomodando mejor mi cabello en la liga.

— No es la primera vez que se rompe. La última vez la dejé así y se curó sola, así que no hay problema.

— Cuando lleguemos al campamento te pueden curar. — Charles se detuvo un momento, sobresaltandomeGracias por habernos ayudado ese día. Si no hubieras hecho eso... probablemente nos habrían disparado.

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⏰ Última actualización: Jul 22, 2020 ⏰

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