Regreso a Owego

Capítulo 27

-Sam, voy arrancarle la cabeza a ese estúpido rubio me dejes o no-dijo Devora mientras colocaba su mochila entro de la tienda de campaña-si es que tiene el don de la oportunidad, ahora que todo estaba tan bien…

-Dev, no están bien las cosas solo…normales-dije encogiéndome de hombros-además da igual que el este aquí, solamente es Dake un chico normal y corriente.

-Sabes que no es verdad cielo-dijo mi prima apoyando su mano en mi hombro-acuérdate que perdías la cabeza por el…

-Después de jugar contigo y conmigo tú fuiste tan idiota como para perdonarle y ahora volverás a caer-dijo Devora sin pelos en la lengua. Siempre había sido así, nunca se callaba lo que pensaba aunque hiciese daño a los demás…ya lo había comprobado varias veces.

-Eso era antes, ha pasado mucho tiempo, no soy tan idiota como hace dos años-bufe enfadada

-Vale, vale, no queramos que saques tu mal humor ahora-dijo mi prima lanzando una mirada asesina a Devora para que no dijese nada.

-Sí, si-fue lo único que contestó con un suspiro-volvamos con los demás, no podemos dejarles que se encarguen ellos de montar todo.

-Si vamos-dije mientras empezaba a caminar con ellas dos hacia el pequeño campamento que habíamos montado en el bosque, las tiendas de campaña ya estaban montadas, era lo único ara lo que servían los chicos en aquel momento, mientras ellos se encargaban de traer el resto de las cosas nosotras nos encargábamos de colocar las cosas de cada uno en su tienda de campaña correspondiente, vale, tendría que compartir la tienda de campaña con Nathaniel, ya sabía que le conocía desde hacía mucho tiempo y todo eso…pero…pero era un chico y…vale nunca he dormido con un chico…

“Samantha deja de pensar en esas tonterías” me dije a mi misma, sacudí la cabeza para bloquear aquellas ideas durante un tiempo, no tardamos en terminar de colocar todo y estar reunidos en el centro de nuestro campamento, todos hablaban entre ellos mientras yo estaba como siempre perdida en mis pensamientos.

-¿Qué opinas Sam?-me preguntó Iris sonriendo.

-¿Eh?-dije despertándome de mi mundo de locuras-si, si.

-¿Segura?-me pregunto esta enarcando una ceja.

-Que si mujer-dijo forzando una sonrisa, mierda, a ver qué burrada acababa de decir…

-Entonces perfecto, Castiel y tu formareis equipo en la excursión por el bosque, ya están todas las parejas asignadas entonces-dijo Devora sonriendo mientras me guiñaba un ojo.

…mierda…mierda…¡mierda!, si es que siempre igual, cuando tengo que escuchar algo no hago ni caso y cuando no tengo que escuchar siempre pongo la oreja…maldita sea.

-Venga vamos, no tenemos toda el día-dijo Castiel cogiéndome del brazo y tirando de mi hacia el bosque, los demás grupos ya se habían marchado y no tenía ni idea de lo que teníamos que hacer…genial, simplemente genial.

-Con delicadeza bestia, ¿o es que quiere arrancarme el brazo?-dije zafándome de su agarre con dificultad.

-Quiero atravesar este maldito bosque de una vez y así no tener que aguantar tus quejas durante todo el camino-dijo mientras caminaba, acelere el ritmo para poder a su paso, como odiaba a la gente más alta que yo con las piernas más largas

-tu amabilidad va aumentando con el paso de los días-dije entre dientes.

-Igual que tú sigues igual de malcriada e insoportable que siempre-dijo con el mismo tono que yo había usado.

Precia que alguien no se había levanto de buen humor aquel día, la verdad es que no había vuelto hablar con él desde que habíamos discutido y me había dado aquella estúpida note, suspire con resignación y este enarco la ceja.