My best gift was to find you. | LARRY.

Me gustas.

Louis podía sentir los cálidos e inexpertos labios de Harry sobre los suyos y lo familiar que se sintió tocarlos en un inocente beso.

Al contrario de lo que hubiese pensado, no se arrepintió ni se sintió culpable. Ni una sola pizca de culpa. Tampoco sintió un nudo en la garganta por el arrepentimiento, ni hubo una sensación repentina de alejarse del menor.

El beso fue corto. Un simple roce de labios pero fue suficiente para que Louis se quedara deseando más.

Más de Harry.

Su Harry.

"Te extrañé." el mayor susurró una vez que se separó del menor.

Harry mantenía ese brillo tan característico en sus ojos. Y Louis podía jurar que podía ver la galaxia reflejada en ellos.

Harry sonrió tímidamente, su rostro estaba ardiendo debido al sonrojo y sus manos jugaban inquietas entre sí. "Yo también, Lou." confirmó, mordiendo su labio inferior. "Gracias por venir."

Louis negó. "No me agradezcas nada, me tardé en venir." susurró avergonzado. "Gemma me dijo que estás enfermo, ¿fuiste al doctor?, ¿tienes medicamentos?, ¿hay algo que necesites?"

"Estoy bien. Gemma me llevó al doctor y me compró medicamentos, estoy mucho mejor aunque aún me mareo un poco al levantarme."

"No sabes lo preocupado que estaba. Creí que te había pasado algo y que..." calló repentinamente y mordió su labio inferior. "Solo tuve miedo." confesó repentinamente y Harry sonrió completamente encantado.

"Dame un abrazo, Lou."

Y Louis sintió taquicardia.

Su corazón bombeaba con tanta velocidad que creyó que en cualquier momento saldría disparado de su pecho. Simplemente asintió y se reacomodó en la cama, extendió uno de sus brazos y Harry lo entendió como una invitación. El mayor lo envolvió en sus brazos y el rizado acomodó su rostro en el pecho contrario.

Louis jamás se había sentido tan en paz como en ese momento.

¿Siguió considerando la idea de convencer a Harry de irse con él una vez llegase Niall? Claro que sí.

¿Lo externó? Claro que no.

Eso era de lo único que se arrepentía.

Louis mimó al menor por bastante tiempo. Compartieron conversaciones cortas donde Harry le contaba cómo habían sido sus días; el mayor se sintió bastante satisfecho al saber que estuvo relativamente normal a excepción de su mala salud.

Harry aseguró que nadie, además de Gemma y en ocasiones su madre, había entrado a su habitación. Además, recordó que su hermana cerraba su habitación con seguro cada vez que salía, solo por precaución.

El hecho de que el menor no haya mencionado al hombre que lo lastimaba lo hacía sentir más tranquilo.

Louis se moría de ganas por besarlo una vez más, quizás en un beso más intenso y más profundo. Ninguno de los dos se atrevió a repetirlo. Ni siquiera a comentarlo, pero Louis sabía que era correspondido.

El tiempo pasó relativamente rápido. Después de un rato Harry comenzó a bostezar repetidas veces y Louis sabía que era momento de dejarlo dormir.

"No tengo sueño." el menor aseguraba, sin embargo, un largo bostezó lo invadió, haciéndolo fruncir el ceño. Louis lo miraba divertido.

"Anda, yo estaré aquí."

"Despertaré y-y... ya no estarás." El menor movió su cabeza para poder mirar al ojiazul, quien estaba mirándolo con anticipación y un leve puchero se formó en los labios del menor.