El Comienzo del Fin 1/2

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La escena que se estaba desarrollando era apocalíptica, no podría describirse de otra forma. La Gran Montaña Ainz Ooal Gown, la más grande, imponente y hermosa de este mundos estaba derritiéndose, la hermosa planicie Yamaiko que se extendía por kilómetros, antes llenas de hermosas flores, animales y fuentes de agua ya no era más que una zona árida llena de monstruosas grietas que exhibían cruelmente las entrañas de la tierra. El océano Blue Planet, llena de vida que poseía una increíble variedad de peces, bestias y reinos submarinos, estaba burbujeando, un hedor subía de él y un color carmesí saturaba desde la superficie hasta el lecho marino.

El hermoso cielo nocturno, adornado por la hermosa luna plateada que siempre estaba acompañada con las majestuosas estrellas, estaba siendo rasgada como pergamino, los astros que deberían de brillar en ella estaban cayendo dolorosamente

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El hermoso cielo nocturno, adornado por la hermosa luna plateada que siempre estaba acompañada con las majestuosas estrellas, estaba siendo rasgada como pergamino, los astros que deberían de brillar en ella estaban cayendo dolorosamente.

El hermoso cielo nocturno, adornado por la hermosa luna plateada que siempre estaba acompañada con las majestuosas estrellas, estaba siendo rasgada como pergamino, los astros que deberían de brillar en ella estaban cayendo dolorosamente

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La hermosa luna, ya no existía.

«¿Cómo llegamosa esto?»

En medio del caos había un solo lugar en todo el mundo que estaba libre, apacible e inmutable, La Gran Tumba de Nazarik, y desde ahí, en el predio, una mujer de mirada penetrante, pero húmedas por las lágrimas, estaba atestiguando la gran batalla de dioses que se desataba en los cielos, su cabello ahora dorado era corto, pero bellamente adornado con joyas y un velo. Su traje color obsidiana con pequeños y detallados bordados con hilos de oro se movían con cada tranquila, pero anormal brisa. Su vestimenta era de una sacerdotisa, no, de una Sumo Pontífice. A pesar de ser una Sumo Pontífice en su espalda estaba un arco de artes rúnicas.

- No te preocupes, cree en los Seres Supremos, cree en Ainz-sama, Neia.

Sacándola de sus aturdidos pensamientos, una monótona voz dio unas palabras de aliento para el quebrantado corazón de la Sumo Pontífice Neia Baraja. Ella giró y una sonrisa de dibujó en su rostro cuando vio que era su vieja amiga CZ.

- ¡CZ-CHAN!

- ¡Uwaa!

Neia corrió hacia su queridísima amiga y la abrazó. Con lágrimas en sus ojos, Neia quería ocultar su rostro en el pecho de su amiga. Si alguien de afuera o sus seguidores la viera así diría que dicha acción no es propia de una Suma Pontífice, pero eso ahora no le importaba en lo absoluto a Neia.

Fons Ratio. [Fanfiction de Overlord]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora