Capítulo 6

5.2K 686 369
                                    

  Bakugou sentía que estaba comenzando a caerse en pedazos. La reciente discusión que tuvo con Kirishima no dejaba de aparecer en su cabeza. Los ojos de Kirishima evitando encontrarse con los suyos, el miedo en sus facciones cuando comenzó a preguntar sobre la verdad y su silencio cuando todo termino.

Hasta después de la discusión, Katsuki aún tenía una pequeña esperanza de que todo fuese un malentendido de su parte. Que el amable chico de pelos parados no iba a tenerle miedo y no iba a dejarlo. Pero, cuando no escucho ninguna respuesta de su parte, sintió que su esperanza era innecesaria.

"Puede que todo haya sido un malentendido de mi parte" no pudo evitar pensar el rubio. "Yo nunca fui más que un compañero para él" cada pensamiento, le hacía más daño que el anterior "Yo nunca fui realmente su amigo" se dijo, "Yo nunca fui alguien especial para él".

Al final de todo, puedo entender lo importante que era para él saber que era especial para Kirishima. Creer que ese chico alegre de gran fuerza y gran corazón lo consideraba alguien especial, hacía muy feliz a Bakugou. Por eso mismo, saber que en realidad él era nada para esa persona tan importante en su vida, lo rompía en pedazos.

No sabía cómo iba a enfrentarse al mañana. Desde que el chico había aparecido en su vida, su mundo se había hecho mucho más grande y colorido. Aunque hubiese sido todo mentira, Bakugou realmente se lamentaba no haberle dicho nunca a Eijirou como él lo hacía sentirse.

"Le tuve que haber dicho" pensaba, "que los cuartos se iluminan cuando él entra", se lamentaba de nunca haberle dicho como sus fuertes pasos caminando junto a los suyos lo tranquilizaban, nunca le pudo decir como sus sonrisas lo hacían sentir una calidez única e inigualable y como cuando su cuerpo lo rodeaba se sentía protegido de toda la mierda que lo rodeaba, incluido el mismo.

Se lamentaba de nunca haber tenido la oportunidad de averiguar si sus sentimientos realmente eran tan solo una simple amistad o eran algo más.

Pero ahora era muy tarde. Y se encontraba solo con sus lamentos en su habitación cuando un fuerte sonido en la puerta lo despistó. Por un segundo creyó haber escuchado mal, hasta que un segundo golpe igual de fuerte volvió a sonar en su puerta.

Mientras Bakugou se levantaba de su cama lentamente, preparándose para pelear con el imbécil que estuviese golpeando su puerta, escuchó junto a los golpes una voz. Era su voz.

- ¿Bakugou? – Decía Kirishima suavemente. - ¿Bakugou? Soy yo, déjame pasar. – El chico rubio se quedó paralizado, no sabía qué hacer. No esperaba que apareciese después de lo que dijo. – Bakugou, por favor, déjame entrar.

Muy lentamente, arreglándose un poco en el camino para no lucir tan patético como se creía, Katsuki abrió su puerta. Al abrirla encontró a un agitado Kirishima con su cabello apuntando a todas las direcciones. Si hubiese estado de mejor humor, Bakugou estaba seguro que se hubiese reído muchísimo por su peinado. Pero ese no era él caso. Así que se quedó parado, esperando que el chico de pelos parados diga lo que tenga que decir.

Kirishima inhaló y exhaló profundamente dos veces y fijo su mirada en los ojos del rubio. Katsuki estaba haciendo lo imposible para no desmoronarse y mantener su cara neutral, y ver tan directamente a los ojos del pelirrojo después de todo lo que sucedió no lo hacía más fácil.

- ¿Podemos hablar? – Le pregunto suavemente Eijirou.

Bakugou se adentró en su habitación, realizando una indirecta invitación a su acompañante para que hiciese lo mismo y se sentó en el borde de la cama. Kirishima entró, e hizo exactamente lo mismo, pero en el borde opuesto.

Quiero ser tú alguien especialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora