Deseé que la naturalidad con lo que lo he dicho le haga perder el interés.

—¿¡Qué!?—se inclinó frenético hacia mí. No había funcionado—. ¡Pero eso no puede ser! Digo... ¡Vamos! ¡Es Michael Jackson! Además, ella es novia de Ross ¿O no?

—¡Lo es! ¡Me lo ha dicho y no he podido decirle nada más! ¿¡Cómo podría!? ¿Cómo podría incluso comenzar a pensar en decírselo a alguien más? ¡Es bastante complicado!

—Lo sé, pero... Quizá no tengas que hacerlo.

Lo estudié atenta. Su pequeña suposición devolvió el aire a mis pulmones.

—Verás que nada pasa...—continuó—. Podrían ser sólo buenos amigos pero... es todo. Además, no creo que uno de los dos quiera dar un paso más allá de lo que están ahora si es que llegan a verse de nuevo, ¿No?

—No lo sé... Es sólo que a veces es inevitable ocultar los sentimientos que tienes hacia una persona.

—Tú lo dices. Pero, Monica, son Ross y Rachel de quienes hablamos; tu hermano y tu mejor amiga.

"Mi hermano y mi mejor amiga"

Me había repetido esas últimas palabras en mi mente decenas de veces hasta este preciso momento. No siquiera luego de haber tenido la diligente oportunidad de toparnos con Michael, sino antes. Mucho antes. ¿Cómo recordar desde cuándo? No lo sé. Quizá desde que sus problemas con ambos habían comenzado. Desde que sus discusiones se habían vuelto más repetitivas, desde que Ross dejó de estar de acuerdo con Rachel en todo, o porque la última vez que ambos pasaron un día entero completamente solos parecía que había ocurrido hace cientos de años.

Tal vez ya lo habían perdido y no lo quise ver. Por ello, porque se trata de Ross, mi hermano; y Rachel, mi mejor amiga.

Y ahora Michael.

—Tranquila... Te aseguro que nada malo podría pasar—susurró, ampliando cada vez más su sonrisa.

Una sonrisa que me inspiró confianza, y que me aseguró haber hecho bien al decírselo a él.

*****

Estaba dando el último bocado de mi desayuno cuando Ross apareció por la puerta. Con una sonrisa deslumbrante, sus ojos brillando y su expresión relajada, actuando como si pretendiera que yo no he visto la escena que ocasionó mientras había charlado con Michael por teléfono la noche anterior.

Traté de reprimir mis pensamientos, e imitar esa sonrisa.

—¿Podría hablarte un momento sobre algo, Rach?

"Rach..."

—Claro, Ross—me levanté para llevar los trastes que utilicé al lavabo—. ¿De qué quieres hablar?

—He querido decirte que...—aclaró su garganta con un aire de timidez, y comenzó a caminar hacia mí—. Tú ya sabes que se acerca nuestro aniversario ¿Cierto?

Sentí un tremendo retortijón en el estómago. Maldición, ¿Lo había olvidado? ¿En verdad?

—Ahm...—mascullé.

Su expresión cambió. Se había dado cuenta.

—...No lo puedo creer—susurró.

—Ross, lo siento—anduve para terminar de acercarme—. ¡De verdad! Es sólo que... con todo esto que ha sucedido, con lo de Michael y otros asuntos...

—...Espera, ¿Michael?—me cortó, luciendo incrédulo—. ¿Qué tiene que ver Michael en esto?

Aguardé en silencio a que se riera y me asegurara de que su pregunta no iba en serio. De que la burla que lanza contra mi rostro no es verdad, y que por esta vez, tan sólo esta, no íbamos a darle más vueltas al mismo asunto.

Just Good Friends (Michael Jackson Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora