мy ѕugar daddy » Taeyong NCT

20

"Reconciliación"

♡

POV YOON:

Me encontraba en el departamento probándome ropa hasta que oigo que golpean la puerta, me puse una bata y abrí.
Me sorprendí al ver que él estaba en frente mío, quise cerrar la puerta en su cara pero él me detuvo.

— ¿No te da gusto verme? —

— ¿Q-Qué haces aquí? — Lo miraba atentamente su mierda parecía fría como la última vez que lo vi.

— Me enteré de lo que andas haciendo. — Lo miré confundida.

— ¿Qué? —

— Siempre supe que eras una zorra, pero no pensé que de ese nivel. —

— ¿Vienes a decirme eso? —

— No precisamente... Si vas hacer una zorra que sea conmigo. — Se acercó más a mí pero yo reproduci unos pasos atrás.

— Ya tuviste tú oportunidad. Ahora ya no hago más tratos contigo. —

— Puedo pagarte aún más. —

— No necesito tú dinero. Así que si vienes a eso mejor vete. — Camine hacia la puerta para abrirla.

— No me iré. Quiero estar contigo. — Cerró la puerta y me acorraló. — Estoy un poco celoso sabés. — Respiro en mi cuello.

— Veo que siempre me necesitaste. — Dije casi riendo.

— Sí, no encontraré a nadie tan puta como tú. — Me molestó lo que dijo y lo empujé.

— ¿Te ofendes? Tú misma sabes que lo eres. —

— ¿Sabes quién hizo que me convirtiera una puta? ¡Tú! ¡Me lo vivías repitiendo a todo momento! Gracias a ti perdí mi dignidad. —

— Ya la tenías perdida. —

— ¡Me provocas tantas ganas de golpearte! Si piensas que me acostaré contigo estas equivocado. Quiero que te vayas ahora mismo. —

— Esa no es forma de hablarme. — Volvió acercarse.
Sus manos a acariaron mis piernas que estaban un poco descubiertas. Respiró en mi boca para luego deborarme con un beso, sentía que faltaba el aire no paraba de besarme. Sentía mi cuerpo apretado al estar contra la puerta y él invadiendo por completo mi espacio. Sus manos subieron a mi trasero, gemí al sentir el tacto y él sonrió.

— Me encanta que estés excitada. —

— No estoy excita.. — No me dejó terminar de hablar porque sus labios volvieron atacar los míos con intensidad, debo decir que siempre me gustó la forma que besa, mordí sus labios y me sostuve de su cuello para poder subirme en sus caderas.

— Ves que si lo estas. — Abrió mis piernas y me empujó contra la pared para rozar su miembro duro con mi entre pierna.

— Ahhhh. — Solté otro gemido pero más fuerte y agudo.

Él continuó besándome y manoseando todo mi cuerpo. Me bajó de su cintura y ahora se encontrbas besando mi cuello y pechos.

— ¿Quieres un poco de sexo con ropa? Esa bata te queda muy sexy.

Asentí y me llevó hasta el sofá de la sala, me acostó y volvió a besarme con más intensidad, gemía cada vez que sentía el roce de su pene con mi vagina a bajo llevaba ropa interior que podía sentirlo muy bien.

— Quiero que te pongas en cuatro en esa mesa ahora mismo. — Quitó mi bata, y me ordenó aquello.

Obedecí y me puse en cuatro arriba de la mesa que estaba cerca. Sentí un fuerte manotazo en mi trasero, que hizo que gemiera.