Zandra (Saga SEAL 4)

Capítulo 12

-Eres un cabrón, Fisher -DK no para de mirar a nuestro alrededor mientras se queja-. Se te olvidó comentarnos este pequeño detalle.

-Si os lo hubiese dicho, no habrías venido -ríe él. Está disfrutando con esto, aunque creo que también se siente un poco nervioso. Quizá no contaba con que hubiese tanta gente.

-Tengo que darle la razón a DK -dice Simmons-. Pretendes que bailemos delante de todos los alumnos del instituto de Joy.

-Es su regalo sorpresa -se queja.

-Regalo que tú le has prometido -matiza DK-. Yo le habría comprado ese libro que lleva meses buscando. Ya lo tenía localizado y ahora se llevará el mérito el jefe.

-En eso concuerdo con ellos, Fisher -Doc se une al resto-. Deberías habernos informado primero, para poder decidir si nos apuntábamos o no.

-Pero esto le va a encantar -nos asegura Fisher-. Y es por una buena causa, chicos. Venga, no jodáis tanto con esto, que lo que se recaude en el festival se destinará a obras benéficas.

-Yo habría preferido aportar dinero -dice Archer, que no ha sonreído ni una sola vez desde que supimos que el baile para Joy no era en su cumpleaños exactamente, sino en un escenario, frente a centenares de adolescentes que tienden a juzgar muy duramente aquello que ven. Nos van a comer vivos.

-Y yo también -me uno a su plan.

-Harper -Fisher se acerca a ella y le rodea los hombros-, ¿a que tú me apoyas?

-Ni me toques, Suicida -lo amenaza, regalándole su mejor cara de pocos amigos. Hacía mucho que no la usaba.

-Joder -se queja de nuevo-. Qué mierda de compañeros tengo.

-Yo te apoyo, Fisher -Cornell lo anima. Y me sorprende que no quiera negarse porque es bastante tímido-. No me va a gustar, pero lo haré. Como has dicho, es por una buena causa.

-Gracias -lo abraza-. Gracias. Me has emocionado, joder. Eres el mejor, Cornell.

-Tampoco te pases -le dice-. No lo estropees ahora.

-Vale, vale. Me calmo.

-Oh, dios mío -creo que Joy acaba de vernos y diría que Fisher tenía razón y la sorpresa le encanta-. Decidme que venís conjuntados porque vais a participar en el festival. Por favor, por favor, por favor.

-Feliz cumpleaños, Joy Joy -exclama Fisher, con su mejor sonrisa-. Los he convencido para que me ayuden.

-Eres el mejor -corre hacia él y le salta encima. Si Fisher no tuviese buenos reflejos, habrían terminado los dos en el suelo-. No puedo creerlo. Esto es lo más.

-Claro -protesta DK-. Que Suicida se lleve todo el mérito. Total, los demás solo vamos a hacer el ridículo delante de todo tu instituto por amor al arte.

-No exageres -Joy se separa de Fisher y lo abraza también a él, como si tratase de consolarlo e infundirle ánimos al mismo tiempo-. Lo haréis genial. No hay nada que vosotros no logréis. Va a ser increíble. Todavía no puedo creerlo. Y habéis venido todos. Oh, Harper, estás más impresionante que ninguno de ellos. Te adoro.

La abraza y la expresión de enfado de Harper se suaviza. Dudo que alguien se pueda resistir a los encantos de la hija del jefe. Y creo que por eso estamos todos aquí, a pesar de que no nos guste la idea de bailar en público. No solo la hemos visto crecer y convertirse en una mujer de fuertes principios y gran determinación, sino que se ha ganado un lugar en nuestros corazones.

-Tú sí que eres valiente -añade-. Bailar con todos estos.

-Eh -protestamos todos a la vez.

-Ya me entendéis -nos saca la lengua-. Ven, Harper. Quiero presentarte a mis amigas. Están deseando conocerte.