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La noche había caído y Jin estaba manejando lo más rápido posible.

-Se quedarán en casa de Hoseok ¿vale? es por seguridad, yo iré a casa de Nam por sus cosas y volveré lo más rápido que pueda.

-Jin… ¡Basta, carajo! ¿qué está pasando? ¡No entiendo una mierda! -Golpeé la guantera.

-Choi sabe que estás aquí, ese bastardo nos ha vigilado a todos, mató a tu padre. -Eso último lo había dicho apenas para escucharse así mismo, bufé, el nudo crecía.

Hoseok ya nos esperaba afuera de su casa, enseguida que nos vio bajó a Jiminie cargándolo y dándole un chupetín.

-Hay mas allá adentro, son todos tuyos. -Le dijo Hobs a Jiminie invitándolo a que fuera adentro por ellos. -Aquí estarán bien Mía. -Añadió antes de irse tras mi pequeño.

-Jin… -Lo abracé -tengo miedo, no entiendo nada, creí que Choi estaba con nosotros, que era bueno.

-No Mía, ese imbécil se ha hecho el bueno para mantener su puesto pero nos ha hostigado a nosotros y a tu madre para darle información de todos nosotros a quién sabe quién.

-Tu sabes perfecto a quién. -Lo miré y el conectó su mirada enseguida. -A Taehyung, el no murió, sigue vivo.

-Lo sabemos, las pruebas de ADN de aquella noche con los cuerpos hallados no coincidían con las de el y con las de Jiminie, ese cabrón junto con Choi orquestaron todo.

-¿¡Y por qué mi papá, joder!? -Le golpeé el pecho para sacar mi ira, el me abrazó aun mas fuerte.

-No lo sabemos Mía, tampoco entendemos nada, lo único que sabemos es que van por ti por eso quiero pedirte algo, no es el momento pero quiero confesarte que desde el colegio estuve enamorado de ti ¿recuerdas las notitas que dejaban en tus libros? era yo solo que nunca me atreví a decirte nada porque estabas ya sabes, con él, así que vámonos de aquí, quizás a Europa, tu, yo, Jiminie y tu madre, puedo ofrecerles amor y seguridad.

No supe qué decir y él pegó en un instante sus labios a los míos, me alejé.

-Jin yo… lo siento mucho, no puedo, ya tengo una familia..

-Lo entiendo. -Me abrazó de nuevo y se dirigió a su auto. -Piénsalo, es por tu bien y por el bien de tu verdadera familia. -dijo antes de irse.

[...]

Narrador omnisciente.

El rubio se encontraba manejando como loco por carretera, debía volver a casa del moreno para recoger las cosas y los papeles de Mía y Jiminie, ellos debían volver pronto a USA pero ¿volver sería lo correcto? Corrijo la pregunta ¿Al volver estarían seguros o la seguridad nunca la han tenido?
Jin perdió el control del auto cuando al parecer lo que era un vagabundo salió de uno de los callejones más oscuros, la penumbra de las calles de Seul le llenaron la espina dorsal de nervios puntiagudos, se reincorporó de nuevo en el volante y encendió el motor pero antes de que pusiera en marcha el auto, un hombre de negro tocó en la ventana, Jin sin bajar el vidrio le preguntó qué pasaba y al no recibir respuesta se recargó en el marco de la ventana solo para encontrarse con que el hombre llevaba una máscara de conejo.
En su mano llevaba un llave y la estrelló de inmediato en la ventana llenando de pequeños trozos de ella el asfalto y el interior del auto, Jin trató de encender el auto pero era tarde, el hombre lo había tomado del cuello de la camisa azotando como consecuente su cabeza una y otra vez en el volante hasta dejarlo inconsciente, entonces vio la oportunidad de abrir la puerta y sacar su cuerpo a la calle, tapando su rostro con un saco y arrastrándolo hasta el mismo callejón por donde había salido el otro hombre.

 ᴀʟ ғɪɴᴀʟ ᴅᴇʟ ʙᴏsǫᴜᴇWhere stories live. Discover now